Aprobado el nuevo Plan global del CELAM (2003-2007)

YPACARAÍ, 19 mayo 2003 (ZENIT.org).- Los obispos delegados del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) aprobaron este jueves en Ypacaraí (Paraguay) el nuevo plan global 2003-2007, poniendo énfasis en la comunión y en la solidaridad como los dos aspectos fundamentales de su labor en el mencionado trienio.

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Según informa un comunicado publicado por esa Consejo episcopal (CELAM), monseñor Antonio Arregui Yarza, recién nombrado arzobispo de Guayaquil (Ecuador), explicó en rueda de prensa que el nuevo plan comprende un total de 35 programas con 88 proyectos que sintetizan, en primer lugar, a la comunión como un aspecto central, es decir, «una búsqueda de Cristo dentro de la Iglesia y que todos los fieles logren un significativo encuentro con El».

En segundo lugar la solidaridad, con la cual se quiere proyectar hacia la sociedad un espíritu que tienda a contrarrestar la corriente de individualismo y de afán ciego de lucro hacia la comprensión de la situación de los débiles.

El prelado explicó que el CELAM es una institución de servicio a las conferencias episcopales locales y anunció la incorporación de un nuevo programa que apunte a un dialogo franco y sincero hacia las políticas que van direccionadas hacia los países, teniendo en cuenta el momento de frágiles democracias que experimenta el continente.

El arzobispo de Guayaquil planteó una evangelización más eficaz para instaurar un clima más sano en la sociedad, donde se difunda más la honradez sobre la corrupción, el valor de la vida sobre el aborto, la eutanasia o la manipulación genética, la cultura de la vida y la dignidad humana sobre la muerte.

El obispo de Pelotas (Brasil), Jaime Chemello, explicó que la Iglesia habla desde el punto de vista ético, de una moralidad que es fundamental, sin pretender ocupar el papel de gobierno, ni hacer de policías o tribunales.

El gobierno o las autoridades «miran más políticamente, que es otro espíritu, y la Iglesia no quiere salir de su papel, porque si ocupa el lugar del gobierno deja de cumplir su programa pastoral», manifestó monseñor Chemello.

«No estamos contra nadie sino a favor de Jesucristo y también del pueblo», aclaró.

La Asamblea del CELAM, que se celebró del 13 al 16 de mayo, con la participación de nueve cardenales, dieciséis arzobispos y más de cuarenta obispos, eligió al cardenal Francisco Javier Errázuriz, arzobispo de Santiago, como nuevo presidente; como primer vicepresidente a monseñor Carlos Aguiar Retes, obispo de Texcoco (México); como segundo vicepresidente a monseñor Gerardo Lydio Rocha, obispo de Vitoria da Conquista (Brasil); como secretario general a monseñor Ramón de la Rosa y Carpio, obispo de Nuestra Señora de la Altagracia, en la República Dominicana; y como presidente del Comité Económico el cardenal Pedro Rubiano Sáenz, arzobispo de Bogotá.

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ZENIT Staff

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