Con el objeto de facilitar la experiencia de la conversión y la gracia de la reconciliación durante el Tiempo de Cuaresma, que inicia mañana, Miércoles de Ceniza, el cardenal Norberto Rivera Carrera ha delegado a todos los sacerdotes de la Arquidiócesis de México las facultades extraordinarias de otorgar la penitencia por el pecado del aborto que, según el canon 1398, merece la excomunión.
En el Tiempo Ordinario, esta potestad de absolver pecados reservados la tienen únicamente los sacerdotes penitenciarios de la Basílica de Guadalupe y la Catedral Metropolitana, así como los ministros delegados por los vicarios episcopales en cada una de las ocho vicarías y aquellos que ocupan el cargo de decanos.
Según explica el SIAME (Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México) en una nota, la disposición del cardenal arzobispo se da a conocer en una circular enviada a todo el presbiterio, miembros de la vida consagrada y fieles laicos de la Arquidiócesis de México, para indicar algunas normas que ayuden a vivir “fructuosamente” el momento especial de gracia que significa la Cuaresma.
En sus recomendaciones para vivir este tiempo de conversión, el purpurado pide tener presente que “nuestras privaciones voluntarias pueden ayudar a aliviar las necesidades de los desvalidos, pues de este modo viviremos la actitud fundamental de la caridad cristiana, compartiendo algo de lo que tenemos”.
Recuerda también que durante el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo se deben observar el ayuno y la abstinencia, mientras que los demás viernes de Cuaresma sólo se obliga a la abstinencia, aunque ésta puede ser conmutada por una especial obra de caridad, de piedad u otro significativo sacrificio voluntario.
Además, aclara que el ayuno es obligatorio para los fieles que hayan cumplido 18 años y hasta los 59, y la abstinencia desde los 14 años en adelante, sin límite de edad.
Sobre la imposición de la ceniza, el cardenal Rivera Carrera pide a los presbíteros que se realice dentro de la celebración eucarística o bien en celebraciones de la Palabra, para que permita a los fieles captar el sentido auténtico de este signo.
Y explica que para “la imposición de la ceniza no se debe usar corchos o instrumentos semejantes, pues esto no es compatible con el significado y naturaleza de un sacramental”.
Por último, el arzobispo de México invita a todos los sacerdotes a que “nos empeñemos en dar las pláticas cuaresmales”.