Católicos y judíos buscan compromisos comunes a favor de la justicia y la caridad

En el encuentro internacional que se celebra en Buenos Aires.

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BUENOS AIRES, lunes, 5 julio 2004 (ZENIT.org).- La búsqueda de compromisos comunes para promover la justicia y la caridad se convirtió estuvo en un tema central de la primera jornada del Encuentro Internacional del Comité de Enlace Católico-Judío, que se celebra en Buenos Aires.

Entre los presentes, intervino el cardenal Walter Kasper, presidente de la Comisión para las relaciones religiosas con el Judaísmo, quien reiteró que la declaración del Concilio Vaticano II «Nostra Aetate» –de la que en 2005 se cumplirán 40 años– constituye un «sólido pilar» sobre el que fundar las relaciones entre católicos y judíos.

Al mismo tiempo, convocó a «una acción conjunta en pro de los valores morales que, como comunidades de fe, compartimos».

«No nos reunimos como políticos, militares u hombres de negocios, sino que nos reunimos como comunidades de fe», aclaró.

«Necesitamos –concluyó– un diálogo que entre al corazón mismo de lo que constituye nuestras identidades como comunidades de fe, y nos permita llevar a cabo sobre esa base nuestra acción común en la sociedad de hoy. Como compañeros estamos ligados unos a otros para el bien, para el «shalom», para la paz de la humanidad».

Entre los presentes, se encontraban, además, el arzobispo Michael Fitzgerald, presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso; y el presidente de la Comisión Episcopal argentina de la Comisión de Ecumenismo, Relaciones con el Judaísmo, el Islam y las Religiones, monseñor Justo Laguna, obispo de Morón.

De la comunidad judía hubo una treintena de representantes, encabezados por el responsable del Comité Internacional de Enlace Católico-Judío, Israel Singer, quien pronunció un discurso.

Tras considerar que el encuentro, que fue declarado de interés por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, es «un gran desafío», Singer reconoció que existe una «gran necesidad de ayudar a judíos y católicos a encontrar causas comunes de trabajo; a decir qué quiere decir justicia y caridad».

En la apertura de las sesiones intervino el cardenal Jorge Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, quien auspició que de estos días surja esa sed de encuentro, que como semilla Dios «puso en nuestro corazón desde el día en que nos miró por primera vez y, como dice el profeta, nos sedujo. Que la seducción de Dios nos haga caminar en su presencia».

El arzobispo de Buenos Aires también transmitió, en nombre del presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Eduardo Mirás, arzobispo de Rosario, «los mejores deseos» para el encuentro que se extenderá hasta el jueves, 8 de julio.

También intervino en la primera jornada Jack León Terpins, presidente del Congreso Judío Latinoamericano.

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ZENIT Staff

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