STAMFORD, 1 sep (ZENIT.org).- La Fundación Cardenal Kung, que defiende a la
Iglesia católica clandestina en China, informa que en torno a la media
noche del 30 de agosto pasado, el Gobierno chino arrestó al padre Liu
Shao-Zhang, un seminarista, veinte religiosas y dos laicos. Todos ellos
pertenecen a la Iglesia católica clandestina y fueron arrestados en la
población de Gongtou, en la provincia de Fujian.
El padre Liu fue golpeado severamente, hasta el punto de causarle un vómito
de sangre y heridas que sangraban externamente. Tiene 38 años y fue
ordenado por un sacerdote clandestino hace seis años en 1994.
Al cabo de un día, dos de las religiosas fueron liberadas después que un
grupo de fieles de la parroquia pagó una gran suma de dinero a la Oficina
de Seguridad Pública. Estas dos religiosas han sido instruidas para que no
salgan de casa sin permiso de esta Oficina. Las 22 personas restantes están
todavía detenidas. Se desconoce su paradero y en este momento no se tiene
ninguna otra noticia.
El arzobispo Yang Shudao, arzobispo clandestino de Fuzhou, que fue
arrestado el 10 de febrero y liberado poco después, está ahora bajo severa
vigilancia por parte de varios guardias que permanecen en su casa las 24
horas del día. No tiene absolutamente ninguna libertad de movimiento.
El padre Gao YiHua, de cuya detención informamos recientemente, fue
liberado el 29 de agosto.
