Comienza la fase preparatoria del primer Sínodo de la Iglesia latina en Georgia

Cuyos objetivos señala el administrador apostólico del Cáucaso, el obispo Pasotto

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TBILISI, jueves, 15 diciembre 2005 (ZENIT.org).- Un compromiso a ser Iglesia en escucha, en oración y en acción: con este objetivo ha arrancado la fase preparatoria del que será el próximo año el primer Sínodo de la Iglesia Latina en Georgia.

El primer objetivo del Sínodo, según la carta pastoral del obispo Giuseppe Pasotto –administrador apostólico para los latinos del Cáucaso– por la ocasión, es «orar y reflexionar para buscar cómo llegar mejor juntos, como Iglesia, a la plenitud de la vida cristiana y a la perfección de la caridad».

«Esto significa ser muy concretos», añade en su misiva, de la que se hace eco el órgano informativo del Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras «AsiaNews».

En opinión del prelado, «el Sínodo debe conducirnos a tomar decisiones y a asumir compromisos frente a los problemas que tendremos que identificar y a los que habremos de responder precisamente con alguna opción compartida por todos» .

«Nos comprometemos a ser Iglesia en escucha: podemos reflexionar sobre la necesidad de escucha de la Palabra, la catequesis, la formación de todos los laicos y sobre el modo de vivir el ecumenismo», escribe.

«Nos comprometemos a ser Iglesia en oración –añade monseñor Pasotto–: podemos reflexionar sobre nuestra liturgia y sobre las iniciativas espirituales».

«Nos comprometemos a ser Iglesia que actúa: podemos reflexionar sobre el compromiso en lo social, en la cultura, en la política, en la familia, en la atención hacia los más pobres, en el desarrollo de las “Caritas” locales, en el voluntariado», propone.

A esta primera fase de «implicación de todos los fieles» durante el mes de diciembre, le seguirán una jornada de encuentro de todos los Consejos pastorales y representantes de comunidades con el obispo en Zerovani (el próximo 8 de enero), así como el trabajo del Consejo pastoral y de las realidades eclesiales.

A partir de ahí se elaborará una síntesis que se presentará a finales de febrero a la Comisión sinodal. En abril deberá estar listo el documento de trabajo y habrán sido elegidos los sinodales. A continuación se celebrará el Sínodo.

Finalmente, el 15 de diciembre de 2006 –décimo aniversario del servicio del administrador apostólico–, «el obispo firmará y promulgará el libro del Sínodo que recoge las indicaciones de la Asamblea».

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ZENIT Staff

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