Comisión belga pide a la Iglesia más valentía a favor de las víctimas de abusos

Propone crear “un fondo de solidaridad” al que contribuirán los culpables

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LOVAINA, viernes 10 de septiembre de 2010 (ZENIT.org).- El informe final de la Comisión creada por la Iglesia católica en Bélgica para recibir denuncias de víctimas de abusos de clérigos pide más valentía y atención para estas personas.

El informe fue presentado en una rueda de prensa, celebrada este viernes en Lovaina, por el profesor Peter Adriaenssens, antiguo presidente de la Comisión para el Tratamiento de Denuncias por Abusos Sexuales en una Relación Pastoral (enero- junio 2010).

En su última recomendación, los miembros de la Comisión afirman: «Las víctimas esperan y merecen una Iglesia valiente, que no tenga miedo de afrontar su vulnerabilidad, de reconocerla, de cooperar en la búsqueda de respuestas equitativas».

Los miembros de la Comisión se dimitieron en pleno después del polémico registro policial del 24 de junio de la sede del arzobispado de Malinas-Bruselas, en el que se secuestraron sus archivos. Este registro fue declarado ilegal este jueves por la justicia belga.

«La Comisión aconseja a la Iglesia que dé un verdadero lugar a las víctimas –añade el informe–. Se han presentado varias propuestas: una jornada de víctimas de la Iglesia, un lugar de recuerdo y oración. La Iglesia debería dar un lugar a este tema en sus propios ritos». 

La Comisión propone crear «un fondo de solidaridad por las víctimas: la Comisión aboga a favor de una responsabilización de los autores de abusos haciéndoles contribuir entre otras cosas en un fondo que sirva para ofrecer terapia u otros tratamientos a las víctimas para las que sea necesario».

La Comisión constata que en la Iglesia en Bélgica no existe una iniciativa específica para el tratamiento de autores de estos hechos. «Es una falta grave –subraya–. La colaboración con otros países puede ayudar a elaborar una respuesta a esta ausencia». 

«La Iglesia debe afrontar expresamente los mecanismos internos que aumentan el riesgo de abusos de posición de fuerza, la manera en que puede intervenir de manera preventiva, asegurar transparencia y reforzar la competencia y la empatía de los religiosos», añade el informe. 

El informe final ofrece testimonios de víctimas, informaciones sobre las víctimas y los autores, la metodología de trabajo de la Comisión y consejos para la Conferencia Episcopal.

La versión en neerlandés del informe puede leerse en www.commissiemisbruik.be. La traducción al francés podrá leerse cuando sea terminada en: http://www.commissionabus.be

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ZENIT Staff

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