El santo padre Francisco ha enviado un telegrama a Alejandro Jaime Mejía con sus condolencias por la muerte de su hermano, el cardenal Jorge María Mejía.
El purpurado argentino, tal y como recuerda el Santo Padre en su telegrama, era archivero y bibliotecario emérito de la Santa Iglesia romana y durante largos años sirvió «con fidelidad y competencia» en varios organismos de la Santa Sede. El Pontífice asegura sus oraciones de sufragio por él, “a quien me unía una larga amistad, para que el Señor conceda su paz a quien se ha entregado de modo tan intenso y generoso a la Iglesia”.
De este modo, en el mensaje el Papa afirma que “con la fe en el misterio pascual de Cristo, que ilumina y llena de esperanza la vida cristiana, y el recuerdo de un pastor dedicado a la misión evangelizadora pido el consuelo divino en estos momentos de dolor, para usted y los seres queridos que lloran tan sensible pérdida, a los que imparto de corazón la bendición apostólica”.
Dos días después de ser elegido sucesor de Pedro, el papa Francisco visitó al cardenal Mejía en la clínica romana Pío XI, donde se encontraba ingresado tras sufrir un infarto.
