SAN JOSÉ, 1 abril 2003 (ZENIT.org).- El arzobispo de San José de Costa Rica ha proclamado «¡Nunca más a la guerra!», recordando que los obispos costarricenses manifestaron su adhesión a la postura del Papa ante un conflicto bélico.
Una nota de prensa difundida a través del Secretariado Nacional de Comunicación de la Conferencia Episcopal de Costa Rica dió a conocer el llamamiento monseñor Hugo Barrantes Ureña.
«Como costarricense –reconoció monseñor Barrantes–, me llena de orgullo recordar que “Costa Rica, desde hace ya muchos años, le declaró la paz al mundo”».
«Por tradición –explicó–, nuestro país ha desplegado mecanismos eficaces para la paz (…). Asimismo, Costa Rica ha dado ejemplo al mundo de que jamás la violencia y las armas pueden resolver los problemas entre los seres humanos».
«Comparto plenamente con mi pueblo la preocupación –dijo–, al constatar que nuestro país forma parte, aunque sea de modo pasivo, de la lista “Operation Iraqui Freedom”, publicada por el gobierno de los Estados Unidos y en la que es considerado un miembro más de la Coalición».
Antes que esta conflagración estallara, subrayó el arzobispo, «los obispos costarricenses asumimos una actitud firme ante esa alarmante posibilidad, haciendo nuestra la súplica del Santo Padre: ¡No a la guerra!».
Con fecha 21 de febrero, los obispos enviaron un mensaje al embajador de Estados Unidos en Costa Rica para que expresara a su presidente su oposición a la guerra y su declarada opción por la paz.
También solicitaron «recurrir a los mecanismos dignos del hombre y las naciones para solucionar conflictos, a saber: el derecho internacional, el diálogo leal, la solidaridad entre los estados y el ejercicio tan noble de la diplomacia».
<br> Y subrayaron: «Nosotros nos unimos desde aquí, desde esta nación rica en democracia y paz, al clamor de tantos hombres y mujeres de buena voluntad que ansían la paz».
Monseñor Barrantes citó las recientes palabras de Juan Pablo II: «Cuando la guerra, como en estos días en Irak, amenaza el destino de la humanidad, es aún más urgente proclamar, con voz fuerte y decidida, que sólo la paz es el camino para construir una sociedad más justa y solidaria».
El arzobispo de San José hizo una invitación a renovar «el compromiso decisivo de construir un mundo de paz fundado en los cuatro pilares que Juan XXIII nos indicó en su histórica Encíclica “Pacem in terris”: verdad, justicia, amor y libertad».
«Este es un momento apremiante para la oración, como nos recuerda el Papa: “Deseo renovar un apremiante llamamiento a redoblar el compromiso de la oración y la penitencia, para implorar de Cristo el don de su paz. Sin conversión del corazón no hay paz”», concluyó.
El texto íntegro del comunicado se puede consultar en la página de la Conferencia Episcopal de Costa Rica .
