CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 3 junio 2007 (ZENIT.org).- Antes que diplomáticos, los representantes pontificios deben ser amigos de Jesús y pastores, ha explicado Benedicto XVI.
Fue la consigna que dejó este sábado a los alumnos de la Academia Pontificia Eclesiástica, en donde se forman los sacerdotes que en el futuro ofrecerán sus servicios al Papa en las nunciaturas apostólicas o en la Secretaría de Estado.
«Quien colabora con el sucesor de Pedro, pastor supremo de la Iglesia católica –les dijo–, está llamado a hacer todo los posible para ser él también un auténtico pastor, dispuesto, como Jesús, Buen Pastor, a dar la vida por su rebaño».
«Que quienes se acerquen a vosotros puedan descubrir siempre al sacerdote que está en vosotros», deseó el Papa.
«De este modo, se manifestará a todos con claridad el carácter típico de la diplomacia pontificia», subrayó. Una diplomacia que, «en vez de defender intereses materiales o visiones parciales del ser humano, promueve valores que surgen del Evangelio, como expresión de los elevados ideales proclamados por Jesús, Salvador único y universal».
«Por otra parte, estos valores son también un patrimonio compartido en buena parte de las demás religiones y culturas», aseguró.
Por este motivo, el Papa pidió a sus futuros representantes que «cultiven una amistad íntima y personal con Jesús, tratando de conocer cada vez mejor y de asimilar sus pensamientos y sentimientos».
«Cuanto más profundamente le conozcáis, más firmemente permaneceréis unidos a Él y más fieles permaneceréis a vuestros compromisos sacerdotales».
«Cuanto más fieles seáis a los compromisos sacerdotales, mejor podréis servir a los seres humanos, y más fecundo será el diálogo con ellos, la paz que propondréis en caso de tensión o de conflicto será más asequible y el consuelo que, en nombre de Cristo y de su Iglesia, ofreceréis a las personas indefensas y las que sufren será más confortante», recalcó.
Para poder entrar en la Academia Pontificia Eclesiástica, sus sacerdotes alumnos deben haber alcanzado la licencia en Derecho Canónico.
La vida de varios Papas del siglo pasado ha estado íntimamente ligada a esta Academia. León XIII, Benedicto XV, Pío XII y Pablo VI han sido alumnos o profesores de esta institución.
