CIUDAD DEL VATICANO, 20 enero 2002 (ZENIT.org).- Juan Pablo II denunció este domingo la «lógica perversa» de atentados y represalias que está llevando al proceso de paz entre israelíes y palestinos a un «callejón sin salida».
«Una vez más –y con qué tristeza– me veo obligado a recordar la dramática situación en Tierra Santa, donde repetidos ataques y represalias siembran todos los días sangre y muerte», reconoció el Papa tras rezar la oración mariana del Angelus con varios miles de peregrinos reunidos en la plaza de San Pedro del Vaticano.
Su llamamiento llegó un día después del ataque de las tropas israelíes a la radio «Voz de Palestina» en represalia por el ataque de un palestino que en una fiesta judía, durante la noche del jueves pasado, acabó con la vida de seis israelíes y provocó treinta heridos en la ciudad de Hadera, al norte de Israel.
«Esta lógica perversa no lleva a ninguna salida y es doloroso constatar cómo los protagonistas del conflicto se han adentrado en un callejón sin salida», explicó el Santo Padre.
«No puedo dejar de invitar sentidamente a los responsables de las partes en lucha a poner punto final a tales enfrentamientos y a la comunidad internacional a no abandonarlos», confesó.
El obispo de Roma concluyó explicando que «es urgente individuar juntos los instrumentos capaces de poner en movimiento el dinamismo de la paz, para permitir que israelíes y palestinos piensen en su futuro».
