Esta mañana, a las 8.00, en el Altar de la Cátedra de la Basílica Vaticana, ha tenido lugar las exequias del cardenal Francesco Marchisano, del Título de Santa Lucía del Gonfalone, arcipreste emérito de la Basílica Papal de San Pedro en Vaticano, vicario general emérito de Su Santidad para la Ciudad del Vaticano, presidente emérito de la Fábrica de San Pedro, presidente emérito de la Oficina del Trabajo de la Sede Apostólica.
El cardenal italiano Marchisano, falleció en Roma el pasado 27 de julio, tras 62 años de sacerdocio, 58 de ellos al servicio de la Santa Sede.
La liturgia exequial ha sido celebrada por el cardenal Angelo Sodano, decano del Colegio Cardenalicio, junto con los cardenales, arzobispos y obispos presentes en Roma. Al finalizar, el Santo Padre Francisco ha presidido el rito de la Ultima Commendatio y de la Valedictio.
En la homilía, el cardenal Sodano ha indicado que «frente a la partida de este mundo, de este querido hermano, nosotros en primer lugar queremos dar las gracias al Señor, y nosotros hoy queremos darle las gracias por el don que nos ha hecho, dando a la Iglesia este generoso ministro».
Por su parte, el Santo Padre destacó, en el telegrama enviado el día de su fallecimiento, que Marchisano «deja el testimonio de una vida entregada a la adhesión generosa a su propia vocación, como sacerdote y obispo solícito para con las necesidades de los fieles y sensible al mundo del arte y de la cultura».
