CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 31 marzo 2004 (ZENIT.org).- Tras la publicación de supuestas amenazas de un atentado contra su persona, Juan Pablo II dio este miércoles una amplia vuelta por la plaza San Pedro en el «papamóvil» descubierto.
El Papa saludó de este modo más de cerca, sentado en el sillón del automóvil, a los más de 14.000 peregrinos que participaron en la última audiencia general antes de la Semana Santa.
La Santa Sede había desmentido este martes las noticias, según las cuales, con motivo de Pascua podría tener lugar un atentado terrorista contra el romano pontífice.
En declaraciones a la prensa, Joaquín Navarro-Valls, portavoz Vaticano, afirmó «No hay absolutamente ninguna alerta».
«Por otra parte, no es mi costumbre comentar este tipo de informaciones, sean verdaderas o supuestas», añadió el director de la Oficina de Información de la Santa Sede.
Medios informativos habían hecho circular el martes noticias, según las cuales, los servicios de seguridad estadounidenses y europeos habían alertado a la Santa Sede, recomendando que el Papa llevara un chaleco antibalas en las ceremonias de Pascua.
En ese mismo día, la Oficina para las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice publicaba el programa de las celebraciones de Semana Santa, en el que se confirma que el Papa presidirá todas las celebraciones.
