BALTIMORE, viernes 20 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- Benedicto XVI envió su apoyo y oraciones a los obispos de los Estados Unidos, que han celebrado su asamblea general anual esta semana en Baltimore.
Así lo señaló el Secretario de Estado vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, en un telegrama que envió, en nombre del Papa, al nuncio apostólico en los Estados Unidos, el arzobispo Pietro Sambi.
El mensaje aseguraba las oraciones del Santo Padre, invocando la “sabiduría del Espíritu Santo” sobre la asamblea.
Daba así testimonio de su oración para que las deliberaciones de la conferencia ayuden al crecimiento espiritual de todas las personas de los Estados Unidos.
Benedicto XVI envió también su bendición apostólica a los prelados, que han celebrado sus sesiones de trabajo desde el lunes hasta el jueves.
En una rueda de prensa celebrada este miércoles al final de las sesiones públicas, el arzobispo Joseph Kurtz de Louisville, en Kentucky, expresó su satisfacción por los logros de los últimos días.
La conferencia episcopal había aprobado cinco prioridades en una asamblea previa, incluyendo: fortalecer el matrimonio, formación de fe centrada en la práctica sacramental, vocaciones al sacerdocio y a la vida religiosa, vida y dignidad de la persona humana, y reconocimiento de la diversidad cultural.
En esta asamblea, los obispos han aprobado unas 65 actividades derivadas de esas prioridades, que se realizarán durante los próximos dos años.
Dirección
El arzobispo Kurtz destacó que como organismo de obispos, “tenemos un enfoque más claro que el que hemos tenido nunca”.
El cardenal Sean O’Malley de Boston lo reafirmó, señalando que “el enfoque que hemos desarrollado a lo largo de los últimos años ha dado una dirección a nuestra Iglesia”.
Como parte de esas prioridades, la conferencia aprobó el martes una carta pastoral titulada “Matrimonio: amor y vida en el plan divino”, así como un documento sobre tecnologías reproductivas titulado “Amor vivificante en una era de tecnología”.
Ambos documentos están ya disponibles en la web de la conferencia episcopal estadounidense.
En una rueda de prensa, le preguntaron al cardenal Justin Rigali de Philadelphia, presidente del Comité de Actividades Provida, si el último documento contiene alguna orientación sobre la cuestión de la adopción de embriones congelados.
Él respondió que el comunicado de la conferencia sigue de cerca la instrucción vaticana “Dignitas Personae”, documento en el que, como recordó el cardenal, la Santa Sede no la prohíbe ni la acepta, por lo que “no estamos en condiciones de ofrecer una respuesta absoluta definitiva a esta cuestión”.
El obispoWilliam Lori de Bridgeport, Connecticut, presidente de la comisión de doctrina de la conferencia episcopal, explicó que ésta es una cuestión que se está estudiando detenidamente.
La orientación, por ahora, dijo, sería evitar dar ese paso “hasta que haya más claridad sobre todos los aspectos que conlleva”.
Además de los votos oficiales y las decisiones tomadas estos días, los prelados disfrutaron de muchos momentos de fraternidad colegial, incluidos momentos de humor.
Baseball
En una prueba para ver si funcionaban los sistemas electrónicos de votación, se les preguntó a los prelados cuál era su equipo de baseball favorito, del Mundial de este año.
Cuando se mostraron los resultados, se oyeron risas: un 75% de los obispos indicó que ni los Yankees de Nueva York ni los Phillies de Philadelphia les merecían su fidelidad.
El cardenal Francis George de Chicago, el presidente de la conferencia, abrió la asamblea pidiendo a los obispos cultivar la unidad entre ellos y en la Iglesia en su conjunto.
También destacó la necesidad de estrechar relaciones con aquellas entidades que se autodenominan católicas, especialmente universidades y medios de comunicación.
En una rueda de prensa tras la sesión del lunes, el cardenal explicó que si una institución se llama a sí misma católica, a los obispos les gustaría mantener buenas relaciones con ella.
Si alguna organización o periódico se sitúa fuera de la comunión católica, continuó, es importante para los prelados aclarar a los que están en comunión que ésa no lo está.
Es nuestra responsabilidad ante el Señor, dijo el cardenal George, ser “los puntos visibles de la unidad en la Iglesia”.
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En la web
Para los documentos de la reunión de otoño:www.usccb.org/meetings/2009Fall
