CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 7 febrero 2007 (ZENIT.org).- Benedicto XVI invitó este miércoles a los jóvenes a ser testigos de la no violencia.
Al despedirse de los miles de peregrinos congregados en el Aula Pablo VI del Vaticano con motivo de la audiencia general, el pontífice dirigió como de costumbre un saludo especial a los jóvenes, a los enfermos, y a los recién casados.
«Queridos jóvenes, sed por doquier testigos de no violencia y de paz –¡esto es importante precisamente hoy!– y con este generoso compromiso, contribuiréis a construir un futuro mejor para todos», les exhortó.
Después, dirigiéndose a los «queridos enfermos», afirmó: «con vuestros sufrimientos sentíos “colaboradores” de Cristo en su sufrimiento, que carga con el dolor del mundo, y precisamente así nos da la vida y la alegría».
Por último, a los recién casados, algunos de ellos presentes en la audiencia con sus trajes de bodas, les dijo: «edificad día tras día vuestra felicidad, como exhorta el apóstol Pablo, con la alegría de la esperanza; constantes en la tribulación; perseverantes en la oración; compartiendo las necesidades de los hermanos».
