A las 10,30 horas local, cuando en Roma eran las 3,15, el airbus A330 de Alitalia que llevaba al papa Francisco aterrizó en el aeropuerto de Seúl. Allí la presidenta Park Geun-hye, le recibe en el primer cambio de programa del viaje y no en la «Blue House» como estaba establecido.
El papa Francisco se transladó en el aeropuerto en un auto utilitaria oscura.
La modificación ha sido anunciada por la agencia oficial Yonhap, y recogido por la web Il sismografo, y se explica que en el Palacio presidencial se desarrollará la Ceremonia oficial de bienvenida, a la que seguirá el encuentro del Santo Padre con las autoridades.
En la «Blue House», el papa Francisco será acogido por la presidenta Geun-hye con un discurso al que él responderá con su primera intervención en Corea, pronunciada en inglés.
El vuelo que lleva al Pontífice desde el aeropuerto italiano Leonardo Da Vinci, ha despegado a las 16.10 de Roma (23.10 en Corea). Para despedir al Santo Padre antes de embarcar con su séquito en el vuelo Alitalia A330, ha estado el presidente del Consejo de Ministros italiano, Matteo Renzi.
El vuelo ha durado unas 11 horas y media, y recorrerido una distancia de 8.970 kilómetros sobrevolando el espacio aéreo de 11 países. La llegada a la Base Militar del Aeropuerto Internacional de Seúl fue con 15 minutos de anticipación, a las 10,15 del 14 de agosto. Además de la presidenta, han estado presentes el nuncio apostólico, Osvaldo Padilla, los obispos de la Conferencia Episcopal Coreana (CBCK) y numerosas autoridades civiles, políticas y militares.
