El Papa pide a Bush el regreso cuanto antes de la plena soberanía a Irak

Con la participación de la comunidad internacional, y en particular de la ONU

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CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 4 junio 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II pidió este viernes ante el presidente de los Estados Unidos George W. Bush, el regreso lo antes posible de la plena soberanía a Irak con la participación de la comunidad internacional, en particular de la ONU.

El Santo Padre pidió también durante la audiencia concedida en el Vaticano «nuevas negociaciones» por la paz en Tierra Santa, programas para acabar con las «insoportables condiciones» de África, y una mayor colaboración entre los Estados Unidos y Europa a favor de la paz.

El obispo de Roma apreció asimismo el compromiso de la administración Bush por la promoción de los «valores morales» en la sociedad norteamericana.

Estos son los temas centrales del discurso que dirigió al presidente al recibirle junto a su esposa Laura y un séquito de medio centenar de personas, entre las que se encontraba el secretario de Estado, Colin Powell.

Tras la audiencia privada entre el Papa y Bush, que duró unos quince minutos, en la biblioteca privada del pontífice, ambos pasaron a la monumental Sala Clementina donde el séquito presidencial se sumó para escuchar el largo discurso papal en inglés pronunciado especialmente al final con voz débil.

La visita del presidente estadounidense al Vaticano ha sido la primera cita de una gira por Europa con la que se recuerda, entre otras cosas, el sexagésimo aniversario de la liberación de Roma, así como la memoria los soldados estadounidenses que dieron su vida por la libertad de los pueblos de Europa.

El pontífice comenzó confirmando la posición expresada siempre por la Santa Sede sobre Oriente Medio.

Por lo que se refiere a Irak, constató el «evidente» «deseo de todos» para que «la situación se normalice ahora lo antes posible con la participación activa de la comunidad internacional y, en particular, de la Organización de las Naciones Unidas, asegurando un rápido regreso de la soberanía de Irak, en condiciones de seguridad para su gente».

«El reciente nombramiento como jefe de Estado en Irak y la formación de un gobierno iraquí interino son un paso alentador hacia esta meta», reconoció.

Por lo que se refiere a Tierra Santa, auspició «nuevas negociaciones, dictadas por un sincero y determinante compromiso de diálogo, entre el gobierno de Israel y la Autoridad palestina».

El obispo de Roma reconoció luego la «constante preocupación» suscitada por «la amenaza del terrorismo internacional.

«Ha afectado seriamente a las normales y pacíficas relaciones entre Estados y pueblos desde la trágica fecha del 11 de septiembre de 2001, a la que no he dudado en llamar «un día oscuro en la historia de la humanidad»», señaló.

«En las últimas semanas, otros acontecimientos deplorables han tenido lugar, conmocionando la conciencia cívica y religiosa de todos, haciendo más difícil, sereno y decidido el compromiso por los valores humanos compartidos: en ausencia de un compromiso así ni la guerra ni el terrorismo podrán ser derrotados», aseguró.

En su discurso, el Papa alentó asimismo el «compromiso» del gobierno estadounidense y de numerosas agencias humanitarias de esa nación, «en particular las de inspiración católica», «para derrotar las condiciones cada vez más insoportables de varios países africanos, que sufren a causa de conflictos fratricidas, de pandemias y de la pobreza degradante que ya no puede ser ignorada».

«Sigo también con gran aprecio su compromiso por la promoción de valores morales en la sociedad estadounidense, en particular los que se refieren al respeto de la vida y la familia», reveló.

Por último, abogó por «un entendimiento más completo y profundo entre los Estados Unidos y Europa» como elemento que desempañará «un decisivo papel para resolver los grandes problemas que he mencionado, así como otros muchos que afronta hoy la humanidad».

La visita de Bush al Vaticano duró menos de dos horas y se realizó en medio de fuertes medidas de seguridad.

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ZENIT Staff

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