CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 5 diciembre 2005 (ZENIT.org).- Benedicto XVI recibió en audiencia este lunes al príncipe Alberto II de Mónaco, quien fue entronizado hace dieciséis días como nuevo soberano de su país.
El encuentro privado entre el Papa y el príncipe, que llegó acompañado por un séquito de seis personas, tuvo lugar en la biblioteca pontificia y duró unos quince minutos.
El nuevo soberano mantuvo después un encuentro con el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado, y a continuación descendió a las grutas vaticanas para rendir homenaje a la tumba de Juan Pablo II.
Antes de despedirse, Alberto II regaló a Benedicto XVI una escultura en bronce de Santa Devota, patrona del principado y de la familia Grimaldi. El Papa le intercambió con las medallas del pontificado.
Alberto y Benedicto XVI se encontraron brevemente el 24 de abril durante la misa de inicio de pontificado de Benedicto XVI. El príncipe, cuyo padre Raniero falleció el 6 de abril, no pudo estar presente en las exequias de Juan Pablo II.
Por sorpresa, Benedicto XVI saludó a los periodistas que cubrían el evento para desearles «un buen período de Adviento y feliz Navidad», según informa «Radio Vaticano».
