CIUDAD DEL VATICANO, 1 octubre 2003 (ZENIT.org).- Juan Pablo II rezará en este mes de octubre para que los jóvenes cristianos sean testigos de Cristo y para que la Iglesia cuente con pastores santos y misioneros.
Cada mes, el Santo Padre ofrece sus oraciones y sacrificios por una intención específica, hecha pública por el Apostolado de la Oración.
En este mes será: «Por los jóvenes, para que sigan a Cristo Camino, Verdad y Vida con generoso entusiasmo y estén dispuestos a dar testimonio de El en todos los ambientes donde viven».
Todos los meses el Papa tiene, además, una intención de oración misionera. En esta ocasión será «Por la Iglesia, para que Dios haga que no le falten Pastores ricos en sabiduría y santidad, prontos a extender la luz del Evangelio hasta los últimos confines de la tierra».
Según explica la dirección del Apostolado de la Oración, con estas intenciones, que además del Papa, son también asumidas por obispos, sacerdotes, religiosos y laicos de los cinco continentes, se busca, entre otras cosas, orientar a los católicos del mundo a «sentir con la Iglesia», pues «son ventanas abiertas a los problemas actuales del mundo».
