El presidente de Nigeria promete justicia para la condenada a la lapidación

Declaraciones de Olusegun Obasanjo en Roma

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ROMA, 20 febrero 2002 (ZENIT.org).- El presidente de Nigeria prometió este martes que su país afrontará de manera justa el caso de la joven condenada a la lapidación por adulterio.

Olusegun Obasanjo, presente en Roma para asistir en una reunión del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA) aseguró «esperar justicia» para Safiya Husseini, de 35 años, condenada a la lapidación por un tribunal islámico del Estado de Sokoto, tras haber tenido un hijo sin estar casada.

«He percibido –aseguró– grandísima atención y preocupación por parte de todo el mundo en relación a Safiya. Una circunstancia ésta que me ha hecho feliz pero que al mismo tiempo me
preocupa».

El presidente confesó: «Me siento feliz al notar cuán pequeña es la aldea global en la que todos vivimos; el mundo entero ha conocido y ha dedicado su atención a la historia de una joven que vive en una provincia perdida de mi país».

Obasanjo quiso tranquilizar a la comunidad internacional. «Safiya ha presentado apelación y sobre la base de esta apelación esperamos que se hará justicia –aseguró–; una justicia que alegrará los corazones de cuantos la han pedido para ella pero que me alegrará muchísimo también a mí».

El presidente nigeriano apuntó a la educación y a la escolarización como los instrumentos fundamentales para abatir las bases machistas en las que se funda la sociedad nigeriana.

«Una mujer que ha recibido una educación es una mujer libre», afirmó recordando que uno de sus primeros actos como jefe del Gobierno democrático de Nigeria fue la introducción de la educación obligatoria durante 9 años para todos los niños y niñas.

«La sociedad nigeriana –dijo el presidente Obasanjo a la prensa– es machista y chovinista. Y una sociedad no se cambia en una noche. Pero tenemos que empezar a trabajar para cambiarla y romper aquellas reglas sociales en las que se ha basado hasta ahora».

En su país, el presidente Obasanjo, católico, está en la mira de los fundamentalistas islámicos que han introducido la sharia (ley islámica) en 13 estados del Norte. Su Gobierno sufre las luchas interétnicas en el sur y en la rica región petrolífera del Delta.

En el exterior, encarna la imagen del hombre nuevo que ha acabado con quince años de régimen militar y es el gozne en torno al que gira el movimiento panafricano que busca el renacimiento del continente.

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación