CIUDAD DEL VATICANO, 28 febrero 2002 (ZENIT.org).- El presidente de Polonia, Aleksander Kwasniewski, invitó a Juan Pablo II a visitar su país en una audiencia celebrada este jueves en el Vaticano.
El 22 de febrero pasado, en declaraciones a la radio pública polaca, Kwasniewski había revelado: «Durante mi visita al Vaticano le presentaré la invitación de las autoridades del Estado. Nosotros invitaremos al Papa el mes de agosto y, desde mi punto de vista, la visita tendrá lugar en agosto».
Un comunicado de prensa emitido este jueves por Joaquín Navarro-Valls, portavoz de la Santa Sede, revela que el pontífice polaco «ha apreciado mucho» la invitación.
El mismo director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede revela que en el encuentro del Santo Padre con Kwasniewski y la sucesiva entrevista del presidente con el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado vaticano, «se pasó revista a la situación de las relaciones Iglesia-Estado en Polonia».
«En particular –explica el comunicado– se analizaron los temas que más preocupan a la Iglesia como vida, familia y solidaridad».
A continuación, sigue revelando Navarro-Valls, «se dio un intercambio de opiniones sobre la situación en Europa y en el mundo».
La audiencia ofrecida por el Papa a Kwasniewski, ex comunista, que llegó al Vaticano acompañado por su esposa y por un séquito de doce personalidades, duró una media hora.
Tuvo lugar en el marco de una visita oficial de tres días a Italia en el que el presidente polaco ha pedido el apoyo de la República Italiana para la entrada de su país en la Unión Europea, objetivo que el gobierno de Varsovia querría alcanzar para el año 2004.
Presidente desde 1995, Kwasniewski fue reelegido en octubre de 2000. Ha sido la cuarta visita del jefe de Estado polaco al Vaticano.
