El presidente de Uruguay agradece al Papa la labor eclesial de reconciliación

El Santo Padre se informa sobre la situación social y económica del país

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

CIUDAD DEL VATICANO, 13 octubre 2003 (ZENIT.org).- Juan Pablo II recibió este lunes en audiencia al presidente de Uruguay, Jorge Batlle, quien agradeció la labor desempeñada por la Iglesia en su país a favor de la reconciliación nacional.

En los 15 minutos de encuentro privado, Batlle agradeció el apoyo prestado por la Iglesia católica a la Comisión para la Paz creada para solucionar el asunto de los desaparecidos.

Según pudieron constatar los representantes de la prensa, Juan Pablo II presentaba buen aspecto, aunque hablaba con dificultad.

«Tengo que decir que le encontré muy bien, muy atento –explicó tras la audiencia el presidente de Uruguay–. Me hizo una serie de preguntas sobre Uruguay. Recordaba perfectamente las dos fechas, del 87 y el 88, en las que había estado en Uruguay. Se acordaba, además, de quién era entonces el presidente».

«Me peguntó por la situación general del país, por la situación social, por la situación económica. Cuando le expliqué que el gobierno es contrario a todas las leyes que facilitan el aborto, hizo una reflexión sobre el tema», afirmó.

«A pesar de las dificultades debidas a la inmovilidad y a la rigidez debida a ciertos tipos de medicinas que se toman en el caso de personas que tienen Parkinson, por lo demás le encontré totalmente normal –aseguró en declaraciones a «Radio Vaticano»–. He visto un hombre atento, despierto, receptivo, interesado, como siempre lo hemos visto cada vez que ha estado en Uruguay o a través de la televisión, durante sus incansables giras por el mundo».

«Ha sido una oportunidad muy significativa y muy importante, pues los valores que Su Santidad ha puesto en el centro de toda su predicación y actividad durante los 25 años de su pontificado, que celebrará el próximo jueves, son valores fundamentales par todos, para nuestra fe y nuestra conducta», concluyó.

La Sala de Prensa de la Santa Sede no reveló detalles sobre los contenidos de la conversación. Declaraciones posteriores de la embajada uruguaya aclararon que el presidente Batlle, de 76 años, quiso agradecer al Santo Padre el apoyo prestado por la Iglesia para encontrar una solución al problema de los desaparecidos durante la dictadura militar de 1973 a 1985.

El arzobispo de Montevideo, monseñor Nicolás Cotugno, presidió la Comisión para la Paz, cuyo informe final fue hecho público por el Gobierno Batlle el pasado mes de abril. Entre 1973 y 1985, según el informe, desaparecieron 26 uruguayos, casi todos ejecutados o torturados.

Batlle dijo que Uruguay superó esa tragedia gracias a la voluntad del pueblo y a la participación de hombres tan extraordinarios como los miembros de dicha Comisión, resaltando el servicio prestado por el arzobispo Cotugno.

El presidente Batlle regaló al Papa un escudo de Uruguay, mientras que el Papa le intercambió con las medallas de su pontificado en oro, plata y bronce.

Tras la audiencia, el presidente Batlle se entrevistó con el secretario de Estado vaticano, el cardenal Angelo Sodano.

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación