Al mismo tiempo, el brazo derecho de Juan Pablo II en la guía de la Sede Apostólica, volvió a alzar la voz contra el embargo impuesto a ese país.
«Nos pronunciamos de nuevo contra el embargo –dijo el purpurado en declaraciones transmitidas por los micrófonos de «Radio Vaticano»–. Por lo demás, la Santa Sede no es la única: también muchos gobiernos, como el gobierno italiano, en algunas ocasiones, se han preocupado por la situación humanitaria de estos muchachos, de estos enfermos, privados de asistencia, y han pedido siempre este cambio. Nosotros también esperamos que prevalezca la sabiduría».
Al final, aclaró: «Se cree que el método de la fuerza puede resolver los problemas; la Santa Sede piensa de otro modo».
Aviones estadounidenses y británicos bombardearon el pasado viernes objetivos cercanos a Bagdad por primera vez desde hace más de dos años, lo que se saldó con tres muertos y una treintena de heridos entre la población civil, según Bagdad.