CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 11 junio 2007 (ZENIT.org).- Benedicto XVI recibió este lunes de manos de los tres presidentes el «Documento de Aparecida» en el que se recogen las conclusiones de la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, celebrada del 13 al 31 de mayo en ese santuario mariano de Brasil.
Según informó la Oficina de Información de la Santa Sede, participaron en la audiencia el cardenal Giovanni Battista Re, prefecto de la Congregación para los Obispos, presidente de la Comisión Pontificia para América Latina; el cardenal Francisco Javier Errázuriz Ossa, arzobispo de Santiago de Chile, presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), y el cardenal Geraldo Majella Agnelo, arzobispo de Sao Salvador da Bahía, primado de Brasil.
«Ahora esperamos que el Santo Padre apruebe el documento presentado para compartirlo con todas las comunidades que con ansiedad esperan sus directrices para seguir la labor evangelizadora en este continente de la esperanza», explica en un comunicado el CELAM.
El «Documento de Aparecida», como ya le denomina el CELAM, presentado al Papa, tiene tres grandes partes que siguen el método de reflexión teológico-pastoral «ver, juzgar y actuar».
«Propone mirar la realidad con ojos iluminados por la fe y un corazón lleno de amor, proclama con alegría el Evangelio de Jesucristo para iluminar la meta y el camino de la vida humana, y busca, mediante un discernimiento comunitario abierto al soplo del Espíritu Santo, líneas comunes de una acción realmente misionera, que ponga a todo el Pueblo de Dios en un estado permanente de misión», explica una síntesis del CELAM.
Ese esquema tripartito está hilvanado por un hilo conductor en torno a la vida, en especial la Vida en Cristo, y está recorrido transversalmente por las palabras de Jesús, el Buen Pastor: «Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia» (Juan 10,10).
Mientras el Papa aprueba este «Documento», el CELAM está preparando su próxima asamblea ordinaria, que se desarrollará en La Habana, Cuba, del 10 al 13 de julio próximos, y que tendrá como uno de sus objetivos fundamentales el colocar las bases para el desarrollo de la gran misión continental, una de las conclusiones centrales de la Conferencia de Aparecida.
