CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 14 marzo 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II ha rendido homenaje al cardenal Franz König, al que califica como hombre de diálogo, fallecido en el sueño a las 3 horas del sábado con casi 99 años.
«Su testimonio de la buena noticia de Cristo y su compromiso por la paz y la reconciliación se han irradiado mucho más allá de las fronteras de su patria», afirma el Papa en un telegrama escrito al recibir la noticia del fallecimiento.
Con el cardenal Franz König desaparece el último de los cardenales en vida que habían sido creados por Juan XXIII (en el consistorio del 15 de diciembre de 1958).
Presidente emérito del Consejo Pontificio para el Diálogo con los no creyentes, y arzobispo emérito de Viena, el cardenal König nació en Rabenstein (Austria) el 3 de agosto de 1905.
Ordenado sacerdote a los 28 años, en 1952 fue nombrado obispo de St. Pölten y en 1956, Pío XII le nombró arzobispo de la capital austríaca, cargo que ocupó hasta cumplir los 80 años, en 1985.
«Sentía una particular preocupación por apoyar a los fieles en Europa del Este en el período de la funesta división política del continente», afirma el Papa en el mensaje, enviado por el cardenal Angelo Sodano, secretario de estado. «Al mismo tiempo, se le ha reconocido el haber construido puentes con las Iglesias de tradición oriental».
El cardenal König desempeñó un papel de protagonista en el Concilio Vaticano II, en el que intervino en varias ocasiones sobre el ministerio y la colegialidad episcopal, la reforma litúrgica, el derecho canónico, los laicos, y María.
Según algunos biógrafos de Juan Pablo II, desempeñó un papel importante en el cónclave en el que fue elegido Papa el cardenal Karol Wojtyla.
Ofreció una significativa contribución al diálogo con los no creyentes y con las Iglesias ortodoxas del Este de Europa, con numerosas misiones realizadas a esos países que gravitaban en torno a la Unión Soviética.
Hombre de gran cultura, fue autor de publicaciones científicas de importancia. En 1951 dirigió la obra en tres volúmenes «Christus und die Religionen der Erde» («Cristo y las religiones de la tierra»); y en 1956 publicó un ««Religionswissenschaftliches Wörterbuch» («Diccionario de historia religiosa»).
Tras el fallecimiento del cardenal König, Austria cuenta ahora con dos cardenales, de los cuales sólo uno de ellos es elector, el arzobispo de Viena Christoph Schönborn.
El colegio cardenalicio se compone de 191 purpurados, de los cuales 126 son electores y 65 no electores (han cumplido los ochenta años).
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