El papa Francisco viajará este sábado a Sarajevo, la capital de Bosnia-Herzegovina. Una visita que solo durará una jornada y durante la cual el Santo Padre mantendrá diferentes encuentros. Todos con un objetivo: “consolidar la fraternidad, la paz, el diálogo interreligioso y la amistad” en una ciudad que hace 20 años se convirtió en símbolo de la Guerra de los Balcanes.
El Pontífice irá a Sarajevo para “poner a Bosnia-Herzegovina en el centro de la opinión pública internacional, de manera que los políticos se esfuercen por encontrar una solución justa y duradera para el bien de todos los ciudadanos de este país”, ha afirmado el cardenal Vinko Puljic, arzobispo de Vrhbosna-Sarajevo, en una entrevista con el diario Avvenire
Por su parte, el ordinario militar y vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Bosnia-Herzegovina, Mons. Tomo Vukšić ha dicho a Radio Vaticano que el Santo Padre “será acogido, conforme a las previsiones, muy bien. En el estadio, que será el punto central de la visita, se esperan unos 65 mil fieles. Las cosas se han organizado muy bien para la visita. Estamos verdaderamente contentos”. Preguntado por la situación actual en Bosnia-Herzegovina, el nuncio Luigi Pezzuto ha indicado a la agencia SIR que “a pesar de las dificultades tengo una visión esperanzada de este país, veinte años después de la guerra. Se están dando pasos adelante hacia la paz, pero todavía no podemos decir que haya una paz completa y perfecta. Se trata de un proceso continuo de fortalecimiento de la paz, porque la gente no quiere más experiencias de guerra”. “El papa Francisco se muestra muy cercano con las periferias del mundo, con los países que tienen que enfrentarse a graves problemas ligados a la pobreza, a la exclusión social. Por tanto, no resulta difícil de entender por qué ha elegido para su visita a Bosnia-Herzegovina, un país que todavía tiene grandes dificultades sociales y que necesita paz y reconciliación”, ha apuntado el director de Cáritas Bosnia-Herzegovina, Mons. Bosiljko Rajić, en declaraciones a la agencia SIR. Para Ifet Mustafic, consejero para las relaciones interreligiosas de la Comunidad Islámica de Bosnia- Herzegovina, el gran desafío que los fieles musulmanes, ortodoxos, católicos y judíos tienen que afrontar para promover el diálogo, el entendimiento mutuo, consiste en “reconstruir la confianza entre las diferentes comunidades, empezar de nuevo a confiar en los demás”. Los dos actos destacados del viaje del Pontífice serán la Santa Misa en el Estadio de Koševo y el Encuentro Interreligioso en el Centro Internacional de Estudios Franciscanos de la ciudad. Tras la Eucaristía, a la que se espera que asistan unas 65 mil personas, Francisco almorzará con los obispos de Bosnia-Herzegovina en la nunciatura apostólica. Posteriormente, el Papa se reunirá con sacerdotes, religiosos y seminaristas en la Catedral. Seguidamente, el Santo Padre participará en el encuentro ecuménico e interreligioso en el Centro Internacional estudiantil franciscano. Finalmente, el Pontífice se reunirá con los jóvenes antes de despedirse del país balcánico y poner rumbo a Roma. Con este, el papa Francisco habrá realizado ocho viajes internacionales y visitado once naciones. 
