Hacia una evangelización interactiva

Habla Xavier Debanne, experto en Iglesia e Internet

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ROMA, domingo, 14 diciembre 2008 (ZENIT.org).- «Second Life», «Facebook», «Youtube»… ¿qué tienen que ver con la evangelización? Mucho, según el ingeniero Xavier Debanne, quien considera que uno de los modos de presencia de la Iglesia en Internet será precisamente la «promoción de una evangelización interactiva, desempeñada por cristianos que interactúan con otros, sean cristianos o no, mediante correo electrónico, mensajería instantánea, chateo, blogs, podcast, «Second Life», etc.

ZENIT ha discutido con el tema con Debanne, consultor de «Information and Communications Technology» (ICT), experto en márketing y comunición. Colabora con organizaciones sin ánimo de lucro e instituciones religiosas sobre Internet.

Debanne es miembro del Consejo Directivo de la Asociación de los Webmaster
Católicos Italianos de la Conferencia Episcopal Italiana. De 1990 a 1998, fue directivo de Olivetti y de 1998 a 2006, de Siemens Informática.

Experto en tecnologías digitales, nacido en París en 1954, está casado, tiene dos hijos y vive en Roma desde 1980. Entre los sitios web gestionados, o proyectados y realizados por Debanne, están el Índice Analítico de la revista «La Civiltà Cattolica»: www.ananiainrete.it/lcc/ o el sitio de la iglesia de Jesús de Roma: www.chiesadelgesu.org.

–¿Cuáles son los peligros y las posibilidades de la interactividad de Internet?

–Debanne: La interactividad de Internet ha cambiado sustancialmente la
cultura occidental. Por ejemplo, tiende a modificar la naturaleza de las relaciones interpersonales, sobre todo entre los jóvenes. Las relaciones «cara a cara» disminuyen y se sustituyen por encuentros en Internet que, a menudo, corren el riesgo de ser superficiales, consecuencia también de la cultura postmoderna, que valora positivamente lo episódico, e impulsa a vivir el diálogo en Internet un poco como un videojuego, donde se niega la complejidad de los problemas, y donde todo es sencillo y aceptable.

Un ejemplo es la limitación de los sitios como «Facebook», que reduce burdamente la amistad a un parámetro binario: una persona está en la lista de los amigos o no está.

Al mismo tiempo, la interactividad de Internet permite, por ejemplo, la visita
desde casa de la Capilla Redemptoris Mater en el Vaticano. Desde el sitio del
Vaticano el usuario puede admirar los mosaicos de la capilla desplazándose virtualmente, mediante el ratón del ordenador. Es también Internet la red que permite a los ochocientos sacerdotes del sitio italiano «preti online» responder a los usuarios individualmente por correo electrónico.

Si por una parte me parece que Internet favorece la difusión de una cultura relativista que deprime la capacidad de situarse ante las pregunas fundamentales, por otra Internet multiplica las ocasiones de encuentro y de anuncio.

–Internet se ha convertido en un ambiente participativo. ¿Esto puede crear confusión?

–Debanne: Los blogs han sido los primeros sitios web verdaderamente participativos, gracias a su facilidad de uso, tanto para el autor como para los lectores, o sea porque escribir contenidos y comentarios es tan fácil como leerlos.

Sin embargo, la proliferación de los blog, de los sitios web y de las redes sociales como «Facebook», puede provocar confusión al usuario si no sabe distinguir entre un blog y otro, en una red aparentemente plana e indiferenciada.

El caso de la enciclopedia online de contenido abierto Wikipedia es emblemático. Aunque su base de datos está integrada por unos tres millones de entradas en 255 lenguas, se trata de una enciclopedia que no es de confianza rigurosa, precisamente por su característica más innovativa, su contenido abierto. De hecho, no existe ninguna auténtica garantía de validez y cuidado de los contenidos. Pero el problema más grave consiste en el hecho de que Wikipedia conduce al relativismo: porque es el conjunto de los usuarios el que decide sobre la autenticidad de las informaciones contenidas en las entradas, se tiende a concordar sólo sobre hechos banales y a poner todas las posiciones en el mismo plano.

Más allá de Wikipedia, me parece que los ambientes cooperativos y las redes sociales en general están en la base de extraordinarios procesos de innovación social, porque el principio básico de las redes sociales es sencillo: explotar la motivación individual para producir valor en favor del grupo.

Sin embargo, para transformar los proyectos cooperativos en proyectos seguros, es indispensable estudiar mecanismos de gobierno eficaces que puedan aumentar su autoridad intelectual sin destruir el impulso cooperativo.

–¿La presencia de la Iglesia católica en la web es buena?

–Debanne: Pienso que actualmente la principal finalidad de la presencia de una organización eclesial en Internet es hacer más visibles sus actividades, propuestas,  documentos, historia, etc. No es por tanto sorprendente que decida lograr este fin activando un sitio web.

Otra modalidad de presencia es la promoción de una evangelización interactiva, desarrollada por cristianos que interactúan con otros, ya sean cristianos o no, mediante correo electrónico, mensajerías instantáneas, chateos, blogs, podcast, presencia en «Second Life», etc. El tema de la evangelización en red ha sido con frecuencia tratado por el Magisterio de la Iglesia desde 1999, y tiene por objeto la construcción de relaciones con quien está en búsqueda, basándose esencialmente en la comunicación pastoral.

Personalmente creo que es eficaz la narración de testimonios religiosos, en un espacio fuertemente orientado al compartir y a la participación, como puede ser un blog, haciendo amplio recurso a imágenes simbólicas, para obtener una comunicación entendida en el sentido de creación de un significado, compartido a través de un proceso de interacción común, ya sea de naturaleza consensual o conflictual.

En mi opininión, el futuro de la Iglesia estará marcado en gran medida por el paso de la comunicación institucional a la comunicación pastoral.

Por Miriam Díez, traducido del italiano por Nieves San Martín

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ZENIT Staff

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