Con el tema «No a la trata de personas y tráfico de migrantes», se realizó del 23 al 25 de agosto en todo Perú la colecta nacional de la campaña de solidaridad ‘Compartir’ 2013, acción solidaria de la Conferencia Episcopal Peruana.
Cientos de voluntarios han recorrido las calles de todas las ciudades de Perú con alcancías y el distintivo de la Campaña Compartir, para recibir el aporte de las personas que han querido dar su aporte. Y concluye este domingo 25 de agosto en los templos y parroquias de todo el país.
“La campaña de solidaridad ‘Compartir’ de la Conferencia Episcopal Peruana este año plantea un tema desafiante y complejo, pero sumamente necesario» se indica en uno de los documentos sobre el tema y se especifíca que «la trata de personas, es una forma de esclavitud contemporánea vinculada al comercio de seres humanos, quienes son objeto de “compra y venta” dentro o fuera de un país para su explotación u otros fines ilícitos. La trata de personas es un grave delito y una violación de los derechos humanos”.
Y precisa que ”la trata de personas es un problema social que tiene que ver con la falta de acceso a la educación e información, a la erosión de las normas y valores morales, al consumismo en las sociedades desarrolladas».
Se especifíca que «también hay causas de naturaleza universal como la falta de concienciación sobre los peligros de la trata entre la sociedad en general y entre los grupos vulnerables en concreto, ausencia de leyes eficaces y falta de aplicación adecuada y efectiva» y añade entre estas «la corrupción generalizada”.
La campaña de solidaridad ‘Compartir’ es una acción de la Conferencia Episcopal Peruana, que desde 1990 trabaja un tema diferente cada año, a favor de las poblaciones más necesitadas del país. La finalidad es financiar diversos proyectos sociales gracias a la ayuda de instituciones y personas naturales.
La actividad de la trata de personas Incluye formas de captación, traslado, acogida Y recepción de personas. Los medios que se utilizan son la amenaza, fuerza, fraude, coacción, engaño y abuso. Y la finalidad de la trata es la explotación, sexual, en trabajos o servicios forzados, esclavitud, servidumbre, venta de niños, extracción de órganos y reclutamiento forzoso. Las formas más comunes de captación son el engaño con falsas ofertas de trabajo. Existe también el padrinazgo: la niña o el niño es entregado a algún conocido o pariente para que reciba educación y mejor calidad de vida, la cual nunca se da.
Existe también la seducción, que se realiza a través de personas dedicadas a enamorar a las víctimas y proponerles una mejor vida para así trasladarlas y explotarlas. Y en algunos casos usan chats, blogs y redes sociales para engañar a quienes entran en contacto.
Ver más en (http://www.iglesiacatolica.org.pe/compartir/acerca-compartir2013.htm)
