CASTEL GANDOLFO, martes, 28 septiembre 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II se despidió este martes de Castel Gandolfo, la localidad en que ha transcurrido la mayor parte del verano, pues este miércoles regresará al Vaticano para continuar con su agenda ordinaria.
Como es costumbre, el Papa se encontró en la mañana con el alcalde y el Consejo del Ayuntamiento de este pequeño pueblo, situado a unos treinta kilómetros de Roma, para agradecer el que le hayan permitido pasar «días serenos y de descanso».
«Ahora me dispongo a regresar al Vaticano, alentado por vuestra cercanía espiritual y vuestra oración», reconoció el pontífice en el breve saludo que les dirigió.
El Santo Padre también recibió en audiencia a los agentes de la policía y del ejército italianos que han garantizado la seguridad de la residencia pontificia.
Ya se había encontrado el domingo pasado con el director y los empleados de las villas pontificias de Castel Gandolfo para agradecerles el «empeño y la fidelidad» con que llevan a cabo sus tareas.
Juan Pablo II llegó a esta localidad el 17 de julio, después de haber pasado doce días de vacaciones en el Valle de Aosta, en los Alpes italianos.
Entre el 14 y el 15 de agosto peregrinó al santuario mariano de Lourdes (Francia) y el 5 de septiembre al santuario nacional italiano de Loreto.
Durante estas semanas el Santo Padre ha cumplido con sus actividades ordinarias desde Castel Gandolfo, en donde a causa de la altura el calor es menos intenso y húmedo que en Roma.
Casi todos los miércoles ha viajado en coche hasta el Vaticano para poder encontrarse con los peregrinos que de otra manera no hubieran tenido espacio para participar en la audiencia general de los miércoles.
Todos los domingos se encontró, con más cercanía que en Roma, con los fieles, en el patio de la residencia pontificia de Castel Gandolfo, con motivo del rezo de la oración mariana del Ángelus.
La agenda del Papa para los próximos días está llena. Este miércoles el Papa se encontrará con más de diez mil peregrinos en la plaza de San Pedro del Vaticano.
El jueves recibirá al presidente de Rumanía, Ion Iliescu, y al presidente del Paquistán, el general Pervez Musharraf.
