La ayuda llega a Gaza con cuentagotas

Relata el padre Manuel Musallam, párroco latino de Gaza

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ROMA, domingo, 1 de febrero de 2009 (ZENIT.org).- «El suministro de energía eléctrica ha aumentado respecto a días anteriores pero no es suficiente todavía, y nos vemos obligados a comprar agua potable». Es lo que relata el padre Manuel Musallam, párroco latino de Gaza.

Al informar sobre la situación a la agencia italiana católica SIR, el sacerdote dice que «la ayuda humanitaria empieza a llegar y también las medicinas, especialmente para curar heridas provocadas por las armas especiales de los israelíes. Sin embargo, el flujo de entrada se ha ralentizado por los controles y el papeleo».

 «Las fronteras hasta ahora están cerradas –constata–. En el puesto de control de Erez están bloqueados el obispos de Estrasburgo junto a otro obispos francés. Las fronteras están selladas y nadie puede entrar ni salir».

 El Gobierno israelí se ha negado a desbloquear del todo los pasos de la frontera con la Franja de Gaza sin garantías sobre la liberación del soldado Gilad Shalit, el cabo israelí secuestrado en junio de 2006.

 Hamas, por su parte, afirma que el alto al fuego sólo podrá prolongarse si Israel reabre los pasos fronterizos.

 El padre Musallam relata también que la escuela de la parroquia, aunque con dificultades, está volviendo a la normalidad.

 «Hemos vuelto a abrir desde hace una semana –informa–. Pero más que clases estamos tratando de entretener a los niños con juegos y actividades diversas, ya que no logran prestar atención, estudiar y concentrarse. Están todavía en estado de shock».

 «Este jueves hemos recibido la visita de algunos funcionarios del Ministerio de Educación y nos han animado a llevar adelante la actividad escolar –añade–. Para hacerlo, necesitamos dinero para poder adquirir el material didáctico necesario».

 «En estos días estamos entregando la ayuda económica del Papa, que nos trajo el nuncio apostólico, monseñor Antonio Franco, hace unos días -explicó–. La estamos distribuyendo en forma de productos alimenticios, a cristianos y musulmanes». Los cristianos que han recibido ayuda son católicos, ortodoxos, baptistas y de otras denominaciones protestantes.

«La solidaridad del Papa es para toda la población», insiste.

Sin embargo, concluye el padre Musallam, «para que sigan ayudándonos, hago un llamamiento a los fieles de las Iglesias de los diversos países y a todos los hombres de buena voluntad para que envíen pequeños donativos y estrechar hermanamientos con la parroquia de Gaza».

Traducido del italiano por Nieves San Martín

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación