La Basílica vaticana representa la Iglesia edificada sobre la fe de Pedro

El cardenal Bertone inauguró la exposición «Petros Eni»

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 18 octubre 2006 (ZENIT.org).- La Basílica de San Pedro representa en el máximo grado a la Iglesia construida sobre el fundamento establecido por Cristo: la fe de Pedro, afirmó el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado vaticano.

Lo dijo el purpurado al presidir el pasado 11 de octubre, en el atrio del Aula Pablo VI, la inauguración de la exposición titulada «Petros Eni» (Pedro está aquí), situada en la Brazo de Carlomagno de la columnata de Bernini, en el contexto de las celebraciones del 500 aniversario de la Basílica de San Pedro.

El principal responsable de la muestra es el profesor Antonio Paolucci, presidente de la Superintendencia para el Polo Museístico de Florencia. La instalación ofrece la posibilidad de admirar un centenar de obras maestras, provenientes de importantes museos del mundo, que ayudarán a los visitantes a recorrer la historia de la Basílica vaticana a través de un itinerario histórico, cultural y espiritual.

«Si cada iglesia constituye para los fieles de un cierto territorio un punto de referencia religiosamente significativo, la Basílica alzada sobre la tumba del apóstol Pedro reviste un valor excepcional para los católicos del mundo entero», dijo el cardenal Bertone

«La Sagrada Escritura –añadió– nos enseña que Dios no necesita templos construidos por el hombre, y que el lugar en el que le gusta poner su morada es un corazón humilde y un pueblo fiel a sus valores».

«Sin embargo, el hombre peregrino en la tierra necesita símbolos, y las iglesias, ya sean de madera o de piedra, desde las pequeñas ermitas rurales y de montaña hasta las majestuosas catedrales, constituyen signos necesarios para la comunidad de fieles, que son la verdadera Iglesia, edificio espiritual constituido por piedras vivas».

El purpurado afirmó que si el Santo Sepulcro en Jerusalén es la «memoria insuperable del misterio pascual», la Basílica de San Pedro «representa en el máximo grado a la Iglesia, construida sobre el fundamento establecido por Cristo: la fe de Pedro, cabeza del Colegio apostólico».

Recordando que desde los inicios del siglo XVI hasta finales del XVII la Basílica vaticana fue una permanente «obra» a cielo abierto, el purpurado afirmó que «es sugestivo recoger de la historia justo la imagen de la obra como metáfora de la Iglesia».

«Una obra –explicó– en la que el edificio espiritual se construye día a día, en la escucha de la Palabra de Dios, en la celebración de la Eucaristía y en la oración, pero también en el encuentro entre los pueblos y las culturas y en la elaboración del magisterio colegial», como ha sucedido en los dos últimos concilios, y en especial en el Vaticano II.

«Como cada iglesia, e incluso más, debido a su universal valor simbólico, San Pedro no puede ser antes que nada y sobre todo sólo ‘casa de oración’«, dijo el purpurado expresando el deseo de que la muestra contribuya a hacer percibir a la Basílica vaticana también como «escuela para crecer en la fe».

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación