SANTIAGO, 2 julio 2003 (ZENIT.org).- El cardenal Francisco Javier Errázuriz, arzobispo de Santiago y presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, entregó este martes al presidente del país, Ricardo Lagos, la posición de la Iglesia católica para resolver los temas pendientes en materia de derechos humanos.
El encuentro entre el purpurado y el primer mandatario tuvo lugar en la fase conclusiva de la recopilación, por parte del ejecutivo, de las propuestas y sugerencias de distintos sectores de la vida nacional, según recuerda una nota informativa publicada por el portal del episcopado chileno (http://www.iglesiachile.org/)
Tras la reunión, el cardenal explicó que la Iglesia católica no tiene necesidad de entregar un documento, porque «son treinta años en los cuales permanentemente ha estado preocupada de este tema».
Por eso, aclaró, el diálogo con el gobernante consistió en una exposición de los distintos temas que se han ido presentando en los últimos meses.
«Agregó que hay un gran interés para que los procesos se agilicen y porque se concrete una efectiva reparación, cuyo derecho no debiera, a su juicio, estar asociado a prescripción de la acción de la justicia», explica la nota informativa.
El cardenal Errázuriz subrayó que debe resolverse el ámbito de extensión de las reparaciones, por ejemplo, si abarcará o no a las personas que sufrieron torturas.
También se refirió a la exhumación de restos de detenidos desaparecidos, y dijo que ello plantea problemas difíciles a la Justicia para establecer la responsabilidad por esos hechos.
El cardenal recalcó la necesidad del «perdón» que, según recordó, es propio de Jesucristo. «El perdón no opone nunca a la justicia, se opone al rencor, se opone a la venganza, pero no a la justicia», afirmó el Arzobispo.
«Cuando uno tiene conciencia de que necesita ese perdón también sabe que otros lo necesitan de igual manera, y por eso es importante que haya un clima en nuestra sociedad que sea propicio a una mayor verdad, a una mayor justicia, y también a un mayor perdón».
En declaraciones publicadas por otro portal católico, http://www.iglesia.cl,
El arzobispo afirmó que le dio la impresión de que el presidente Lagos tiene muy presente la importancia de esclarecer la verdad en los hechos ocurridos en el régimen militar, de que los procesos judiciales «no tarden por ningún motivo», y de la necesidad de reparar a los familiares de las víctimas de violaciones a los derechos humanos.
«Sin duda hay personas que fueron torturadas y que tienen invalidez después, y que han sufrido profundamente por ese hecho, que también aspiran a que exista una reparación con su caso», sostuvo el purpurado.
