JERUSALÉN, jueves, 15 junio 2006 (ZENIT.org).- El arzobispo coadjutor del Patriarcado Latino de Jerusalén, monseñor Fouad Twal, alerta de que «la crisis de la población palestina es dramática» y de que se está viviendo «al borde de la guerra civil».
A través del servicio informativo del Episcopado Italiano («Sir»), el prelado expresó este jueves su «satisfacción y alegría» por la cercanía del Papa hacia la probada población de esa región del planeta, Tierra Santa.
Así lo confirmó el miércoles un comunicado de prensa de la Santa Sede, que hace un llamamiento a la negociación como «único camino» hacia una paz «justa y duradera» (Zenit, 14 junio 2006).
Monseñor Fuad Twal hace este jueves una invitación «a la parte más fuerte» a tender la mano «a la más débil» –israelíes y palestinos, puntualiza el «Sir»– para reanudar el diálogo.
En cuanto al drama de la población palestina, «hasta hoy hemos oído las voces de quien, a nivel internacional está buscando la forma de proporcionar ayuda. Y mientras ellos discuten la población intenta sobrevivir con lo mínimo», advierte.
«Se necesita que las instituciones internacionales, políticas, las ONG, traigan ayuda concreta. Y que hagan lo mismo también todas las diócesis e Iglesias locales del mundo», pide.
«Se requiere una movilización general para evitar la catástrofe –insiste el prelado–. No queda mucho tiempo».
En cuanto a los ataques y violencia de estos días (entre palestinos y entre palestinos e israelíes), el arzobispo Fouad Twal considera que «reflejan el miedo y el caos que nadie logra controlar».
«Estamos en la anarquía total, al borde de una guerra civil», lamentó.
Y «pedimos a Dios –manifestó– que los gobernantes de los dos pueblos realicen gestos valientes para construir la confianza recíproca y retomar el diálogo».
