La policía brasileña detiene en Foz de Iguazú al ex general golpista Oviedo

La policía brasileña arrestó ayer al general Lino César Oviedo, considerado como el responsable del fracasado golpe de Estado, en Paraguay, del pasado mes de mayo. Oviedo había sido ya condenado a diez años de cárcel por su participación en el intento de golpe de Estado de 1996 y por el asesinato del vicepresidente de Paraguay, Luis María Argaña.

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El general paraguayo Lino César Oviedo fue detenido ayer por agentes de la Policía Federal en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, en la frontera con Paraguay, y posteriormente trasladado a Brasilia, según informó la agencia brasileña de noticias Estado. Oviedo fue localizado en un apartamento alquilado a nombre de otra persona, y no presentó resistencia, a pesar de tener a mano un revólver cargado.

La prisión de Oviedo había sido solicitada hace dos semanas por el juez Mauricio Correa, integrante del Supremo Tribunal Federal, acatando un pedido de prisión preventiva para efectos de extradición efectuado por el gobierno paraguayo.

Oviedo se encontraba en un apartamento situado junto a las barrancas del río Paraná, desde donde se divisa el territorio paraguayo, y en su poder fueron encontrados más de 10 teléfonos móviles habilitados con líneas del
vecino país.

El pasado 8 de junio, el ministro paraguayo de Obras Públicas, José Planás, había adelantado que Oviedo sería detenido antes del fin del corriente mes, y mencionó que el gobierno paraguayo poseía pistas a raíz de llamadas telefónicas del general golpista que habían sido rastreadas. El consulado paraguayo en Foz de Iguazú fue notificado por la Policía Federal de la detención de Oviedo, cuyas circunstancias no han sido comentadas ni por los portavoces policiales ni por las autoridades diplomáticas.

Representantes del consulado paraguayo se dirigieron hacia las instalaciones de la Policía Militar en esa ciudad fronteriza, al parecer con el objeto de entrevistarse con Oviedo, de quien no se tenía información desde el pasado 9 de diciembre, cuando renunció al asilo político que le había sido concedido en Argentina.

Oviedo fue juzgado y condenado por la justicia paraguaya a diez años de prisión por su participación en una intentona golpista en 1996 y en el asesinato del vicepresidente de su país, Luis María Argaña.Según versiones no confirmadas, Oviedo fue trasladado anoche a la capital brasileña, donde será tramitada su extradición a Paraguay, solicitada hace dos semanas y aprobada por el Ministerio de Justicia brasileño.

Por su parte, el ministro paraguayo de Defensa, Nelson Argaña, en declaraciones a varias emisoras confirmó que Oviedo fue detenido por policias federales brasileños hacia las ocho de la tarde (hora local) en Foz de Iguazú. Periodistas paraguayos y brasileños que se apostaron en el edificio policial fueron desalojados por los agentes.

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ZENIT Staff

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