PUERTO PRÍNCIPE, lunes, 10 mayo 2004 (ZENIT.org).- De acuerdo con el nuncio apostólico en Haití, monseñor Luigi Bonazzi, «la Santa Sede ha expresado su deseo de que las autoridades competentes de la comunidad internacional consideren la posibilidad de cancelar la deuda exterior de Haití».
Así lo afirmó en Puerto Príncipe, en un discurso pronunciado el miércoles ante más de doscientos representantes de gobiernos, de la sociedad civil y de las delegaciones diplomáticas.
Según explicó a «Misna» el secretario de la nunciatura en la capital haitiana, en su discurso monseñor Bonazzi denunció «la escandalosa pobreza en la que vive la mayoría de los hombres, mujeres y niños de Haití».
Tras cuatro años de servicio en el pequeño país caribeño, el arzobispo Luigi Bonazzi ha sido nombrado representante del Papa en Cuba, adonde está a punto de trasladarse.
En su opinión, la última crisis política –que acabó el 29 de febrero con la caída del presidente Jean-Bertrand Aristide– «ha demostrado claramente, justamente en el año del bicentenario de la independencia de Haití, que un método de gobierno centrado en la explotación de los recursos de una nación en beneficio personal está destinado al fracaso y empobrece más el país».
La deuda exterior de Haití asciende a 1,3 mil millones de dólares en préstamos contraídos especialmente con el Banco Mundial y con el Banco Interamericano para el Desarrollo.
