CIUDAD DEL VATICANO, martes, 16 enero 2007 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha nombrado nuncio apostólico en Sudán a monseñor Leo Boccardi, hasta ahora representante permanente de la Santa Sede ante la Agencia Internacional de la Energía Atómica y ante la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa, ha informado este martes la Oficina de Información de la Santa Sede.
Monseñor Boccardi era también hasta ahora observador permanente de la Santa Sede ante la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial y ante la Oficina de las Naciones Unidas en Viena.
Al mismo tiempo, el Papa ha elevado al nuevo nuncio a la sede titular de Bitetto, con dignidad de arzobispo. Pronto recibirá la ordenación episcopal.
Sucede en el cargo de representante del Papa en Jartum al arzobispo Dominique Mamberti, quien el 15 de septiembre de 2006 fue nombrado secretario para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado –cargo conocido comúnmente como «ministro» del Papa para Asuntos Exteriores–.
Monseñor Leo Boccardi nació en San Martino in Pensilis, Campobasso (Italia) el 15 de abril de 1953.
Fue ordenado sacerdote el 24 de junio de 1979. Entró al servicio diplomático de la Santa Sede el 13 de junio de 1987, y prestó sucesivamente sus servicios en las representaciones pontificias de Uganda, Papúa Nueva Guinea, Bélgica y ante la Sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado.
Representaba a la Santa Sede en las instituciones internacionales con sede en Viena desde el 17 de marzo de 2001.
Además del italiano, habla francés, español e inglés.
La Iglesia católica en Sudán, país africano en buena parte musulmán, de más de 40 millones de habitantes, en el que el 12 por ciento son católicos, experimenta un importante crecimiento.
Si bien hace 25 años sólo había un sacerdote en Jartum, la capital, ahora hay 121. La arquidiócesis cuenta con 30 parroquias y 123 centros en los que se celebra regularmente la Eucaristía.
La arquidiócesis de Jartum dirige el proyecto «Salvar a los salvables» que, entre otras cosas, ha creado 65 escuelas con unos 33.000 alumnos y 1.050 maestros. El proyecto trata de ofrecer una educación adecuada a los niños de las poblaciones del sur (donde se encuentra la mayoría cristiana) que se han refugiado en Jartum. Desde el año 2005 rige un tratado de paz entre el norte y el sur del país.
