ROMA, 13 mayo 2001 (ZENIT.org).- Entre los 34 sacerdotes que Juan Pablo II ordenó en la mañana de este domingo, 11 de ellos han sido formados en el seminario diocesano «Redeptoris Mater», fundado por el Camino Neocatecumenal en Roma.
Estos nuevos sacerdotes, que tienen una edad media de 30 años, provienen de India, Uruguay, Francia, Zambia, Chile, España, El Salvador, Venezuela, Honduras e Italia.
«No ha sido fácil decir si al Señor –confiesa Miguel Chiner, español–, pues mis pensamientos tomaban caminos diferentes a los suyos. Cuando estaba cerrado en mis proyectos, el Señor me dio la gracia de abrirme a él a través del Camino Neocatecumenal. Entró en mi corazón ofreciéndome dones gratuitos e inmerecidos que nunca antes había conocido y que me han marcado profundamente».
Ivin Arokiasatny, de India, cuenta así su vocación: «Durante una peregrinación a Bombay sentí la llamada del Señor. Ya estaba dentro del Camino Neocatecumenal. Después de haber sido catequista, decidí entrar en el seminario «Redemptoris Mater», donde estudié filosofía. Más tarde vine al «Redemptoris Mater» de Roma para estudiar teología. He estado en misión en Etiopía, en Nicaragua, y he visto lugares de sufrimiento. Ha sido una experiencia que me ha ayudado mucho y que me sigue ayudando hoy cuando me encuentro con parroquianos con los que desempeño mi servicio y que viven en el sufrimiento».
Los seminaristas, formados en este seminario creado por el Camino Neocatecumenal, ofrecen sus servicios en la diócesis de Roma. Ahora, tras la ordenación sacerdotal, esperan el destino pastoral que les indicará el cardenal Camillo Ruini, obispo vicario del Papa para Roma.
