Un doble atentado reivindicado por el grupo insurgente paquistaní Jamaat-ul-Ahrar (JuA) ha provocado la muerte de al menos 15 personas y herido a otras 75, durante la misa dominical en un barrio cristiano de Lahore, en el noreste del país.
Este lunes la reacción no se ha hecho esperar y cientos de personas se manifestaron contra el Gobierno incluso con actos violentos, en los que accidentamente murió una mujer. Por su parte, el azobispo de Karachi y presidente de la Conferencia Episcopal de Pakistán, Mons. Josph Coutts, hizo un llamamiento a la calma.
El ataque, que ha tenido lugar en la segunda ciudad más poblada de Pakistán, es el más mortífero de los hasta ahora perpetrados contra la minoría cristiana en este país, tras el atentado suicida que los talibán llevaron a cabo contra una iglesia de Peshawar en septiembre de 2013. En aquella ocasión fueron 82 los muertos y decenas los heridos.
Dos explosiones encadenadas se escucharon al final de la mañana en las proximidades de dos templos situados a unos 500 metros uno del otro, en el barrio de Yunabad, donde viven numerosos fieles cristianos.
El papa Francisco ha lamentado estos actos de violencia y ha pedido el cese de la persecución de los cristianos al término del tradicional rezo del Ángelus. “Con dolor, con mucho dolor he sabido de los atentados terroristas de hoy contra dos iglesias en la ciudad de Lahore en Pakistán, que han provocado numerosos muertos y heridos”, ha dicho el Santo Padre con tono serio.
Desde la ventana del Palacio Apostólico, el Pontífice ha señalado que en algunas partes del planeta los cristianos son perseguidos por el mero hecho de profesar su fe. Así, el Papa ha reclamado “que esta persecución contra los cristianos, que el mundo trata de esconder, termine, y haya paz”.
“Son iglesias cristianas, los cristianos son perseguidos. Nuestros hermanos vierten la sangre solamente porque son cristianos”, ha subrayado Francisco.
El Obispo de Roma ha concluido sus palabras asegurando su oración “por las víctimas y sus familias”. “Pido al Señor, imploro al Señor, fuente de todo bien, el don de la paz y la concordia para ese país”, ha enfatizado.
Las escuelas cristianas de Karachi y Punjab permanecerán cerradas este lunes como gesto de protesta contra los atentados.
