ROMA, martes, 7 septiembre 2004 (ZENIT.org).- Para la labor de evangelización de un obispo es esencial utilizar eficazmente los medios de comunicación, considera el presidente del Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales.
El arzobispo John P. Foley intervino este martes en Roma durante el seminario de actualización para obispos con menos de cinco años de ordenación de lengua francesa, española o portuguesa, según informa el Vatican Information Service (VIS).
En concreto, recordó a los presentes que toda diócesis debería tener un plan pastoral para las comunicaciones.
El prelado expresó a los nuevos obispos su convencimiento de que «el uso eficaz de las comunicaciones es esencial para la evangelización y para el ministerio episcopal en el mundo de hoy».
«Escuchar la buena noticia de Jesucristo es la comunicación más importante que los seres humanos pueden recibir; por ello nuestra primera responsabilidad es precisamente comunicar esa noticia de la manera más eficaz posible», reconoció.
«¿Cómo podemos comunicar la buena noticia de Jesucristo?», se preguntó. «Obviamente con el buen ejemplo», comenzó respondiendo, «a través de la predicación y la enseñanza de las verdades básicas de la fe, del conocimiento de la Biblia y ayudando a la gente a orar».
«La buena noticia de Cristo la comunicamos a través del trabajo positivo que la Iglesia hace en su nombre», añadió, y a través de los medios de comunicación.
Por este motivo la instrucción pastoral de 1992 «Aetatis novae» sobre las comunicaciones sociales«insta a que en cada diócesis se desarrolle un plan pastoral para las comunicaciones, y que las comunicaciones formen parte de todos los planes pastorales».
El prelado habló de los programas de radio y televisión y a las publicaciones católicos, pidiendo que sean de calidad.
«Esa marca de alta calidad, por supuesto, debe surgir de nuestra autenticidad, nuestra credibilidad como representantes del Evangelio de Jesucristo», aclaró.
