ASUNCIÓN, jueves, 14 junio 2007 (ZENIT.org).- En su carácter de precandidato a la presidencia de la República por la disidencia colorada, el vicepresidente de Paraguay Luis Alberto Castiglioni compartió ayer 13 de junio un almuerzo con el nuncio apostólico, monseñor Orlando Antonini, a quien presentó una propuesta que forma parte de su programa de Gobierno y que prevé la posibilidad de un acuerdo en el campo educativo entre la Iglesia Católica y el Estado para la enseñanza de «valores y principios» con la ayuda eclesial.
Al final de la reunión, que duró unas dos horas, Castiglioni habló con la prensa y defendió su plan, argumentando que la Iglesia «tiene profundas raíces en la cultura de nuestra nación y una extendida su influencia» en todo el país, por lo que puede cooperar, «fundamentalmente desde el punto de vista de la promoción de principios y valores en el ámbito de la educación tradicional».
Lamentó que ya durante estos cuatro años de mandato no haya podido llevar adelante dicho anhelo.
«Lamentablemente no hemos conseguido nuestro propósito, porque es el Presidente quién tiene que establecer ese acuerdo», refirió.
En cuanto a cómo recibió el nuncio el referido planteamiento, Castiglioni dijo que monseñor Antonini lo ve como una cuestión «muy positiva» y «factible», por lo que espera que pueda concretarse.
«Inclusive me habló de ejemplos similares en otras partes del mundo y que con la amplísima difusión de nuestra Iglesia y de los templos de nuestra Iglesia Católica en Paraguay, él ve que sería muy positivo en la sociedad paraguaya. Estamos hablando de la educación de nuestros hijos y de la educación de los hombres del futuro», indicó el vicepresidente.
