Prelado del Opus Dei: «La santidad no es para una minoría»

Inaugurado el Congreso en el centenario del nacimiento del beato Escrivá

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ROMA, 8 enero 2002 (ZENIT.org).- «La santidad no es para una minoría», afirmó el prelado del Opus Dei al inaugurar este martes un congreso internacional con ocasión del centenario del nacimiento del beato Josemaría Escrivá.

El obispo Javier Echevarría desarrolló el perfil humano e intelectual del beato y recordó el núcleo del mensaje del fundador del Opus Dei, según el cual, «la santidad no se entiende ya como algo reservado a una minoría», sino abierto «a todos los hijos de Dios».

En el congreso, que lleva por lema «La grandeza de la vida corriente», participan 1.200 personas de 57 naciones para discutir temas relacionados con la familia, el desarrollo, la educación y la integración social a la luz del mensaje del beato Escrivá. Se está celebrando en el Hospital del Santo Espíritu de Roma.

Según monseñor Echevarría, desde 1928 (año de la fundación del Opus Dei) Escrivá proclamó la búsqueda de la «plenitud de la vida cristiana» en las «circunstancias ordinarias» donde la Providencia divina ha situado a cada uno y, muy concretamente, a través del «trabajo profesional, que se convierte así en medio e instrumento de santidad y apostolado».

En el núcleo del mensaje de Escrivá yace, dijo su sucesor, la «audaz formulación» del «materialismo cristiano» como algo opuesto a los materialismos cerrados al espíritu. Ese «materialismo cristiano» llevaba al beato a «valorar altamente las realidades terrenas, a referirlas a su Creador y a tratar de convertirlas en instrumento de apostolado».

En la sesión plenaria intervino a continuación Giorgio Rumi, profesor de Historia Moderna en la Universidad de Milán (Italia), sobre el contexto histórico de la vida del beato Escrivá.

Según el historiador, el beato Josemaría «ha restituido al trabajo su dignidad original, integrándolo en el proyecto general de santificación del tiempo».

Así, aclaró, el trabajo no puede ser visto ni como alienación, ni como instrumento de lucha de clases, ni como algo negativo de lo que el hombre deba liberarse. Para Escrivá, dijo Rumi, el trabajo es una «bendición» y «contribuye a empapar las realidades temporales de sentido cristiano» y, por tanto, se enlaza con la obra creadora y redentora de Dios.

El congreso se celebra en Roma del 8 al 11 de enero de 2002 y puede seguirse en directo a través del la página web http://www.escriva2002.org.

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ZENIT Staff

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