ROMA, 17 marzo 2002 (ZENIT.org).- Un grupo de importantes organizaciones no gubernamentales (ONG) han hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que imponga «frenos claros y consistentes» a las partes en lucha que cometen abusos contra las agencias de ayuda civiles y humanitarias en Sudán, según informa la agencia IRIN.
«Se deberían establecer precisas indicaciones para la acción en ambos casos, acordadas por todos los actores internacionales relevantes», afirma la declaración hecha pública el 1 de marzo por trece ONG que trabajan en las dos partes, norte y sur de Sudán.
Las ONG urgen a Naciones Unidas, Unión Europea, Gobierno de Estados Unidos y otros países interesados, y a todas las ONG a «lanzar un claro y consistente mensaje al Gobierno de Sudán y las otras partes en lucha de que cualquier ataque contra civiles inocentes y contra los servicios humanitarios es inaceptable».
La declaración se produce en reacción al bombardeo aéreo gubernamental a un centro de ayuda en la aldea de Bieh, Alto Nilo Occidental (estado de Wahdah) el 20 de febrero en el que murieron al menos 24 personas.
El ataque a Bieh tuvo lugar durante una distribución de alimentos a unas 10.000 personas. El Gobierno sudanés ha sido objeto de acusaciones similares en numerosas ocasiones en el pasado, aunque Jartum a su vez afirma que los grupos rebeldes atacan a las poblaciones civiles.
Se estima que hay unos 4 millones de personas internamente desplazadas en Sudán como resultado del actual conflicto.
Mientras tanto, una amplia coalición de grupos de la sociedad civil sudanesa y ONG autóctonas han hecho un llamamiento al Consejo de Seguridad de la ONU para que cree «puertos seguros» en el sur de Sudán con el fin de proteger a los civiles de lo que llamaron «política de tierra quemada».
La declaración hecha pública por la coalición el 5 de marzo hace también un llamamiento a las compañías petroleras que trabajan en el Alto Nilo occidental, una región clave de producción de petróleo, para que detengan la extracción de crudo hasta que se logre la paz en Sudán.
