MELBOURNE, 23 noviembre 2001 (ZENIT.org).- El Consejo Aborigen Nacional Católico (NATSICC) y el Consejo Australiano Católico de Justicia Social (ACSJC) dieron la bienvenida este viernes a la petición de perdón del Papa a las poblaciones aborígenes de Oceanía.
«Nos sentimos realmente complacidos al recibir esta petición de perdón del Papa –explican los representantes católicos de los aborígenes del inmenso país–. Esto demuestra que no ha olvidado a nuestro pueblo desde que se encontró con nosotros en Alice Springs en 1986 y tiene cuidado de nosotros».
En la exhortación apostólica «Iglesia en Oceanía», publicada este jueves para recoger las conclusiones del Sínodo de los obispos del continente de 1998, el obispo de Roma pide solemnemente perdón a los aborígenes por los abusos de que han sido objeto por parte de hijos de la Iglesia y anuncia la creación de una «Comisión de la verdad».
«Esto marca un nuevo comienzo en nuestra relación con la Iglesia. Es una de las mayores declaraciones históricas que hemos visto sobre las injusticias sufridas por los pueblos indígenas», afirma Vicki Walker, presidenta de NATSICC.
«Es una noticia estupenda –reconoce por su parte el obispo William Morris, presidente de ACSJC–. Los relatos del dolor infligido por las acciones de gente de la Iglesia, incluso aunque hayan sido realizadas con buenas intenciones, han sido escuchados en los más altos niveles de la Iglesia. Reconociendo el pasado y pidiendo perdón, como líder de la Iglesia católica, el Papa nos ha ayudado a todos nosotros a seguir juntos adelante».
NATSICC es el órgano de los indígenas católicos y asesora a los obispos católicos australianos en materia de asuntos que afectan a los aborígenes. La ACSJC es la agencia nacional de justicia y paz de la Iglesia católica en Australia.
