Diálogo “abierto, transparente y regular” de las Iglesias con la Unión Europea

En vísperas de una década crucial para el continente

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BRUSELAS, viernes 20 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- Durante su Asamblea Plenaria, celebrada en Bruselas, Bélgica, los obispos de la Comisión de los Episcopados de la Comunidad Europea (COMECE) han felicitado a los nuevos cargos nombrados para la Unión Europea y han emitido un comunicado final en el que hablan del “diálogo abierto, transparente y regular” que las instituciones europeas mantendrán con las Iglesias.

Reunidos en su Asamblea Plenaria del 18 al 20 de noviembre, los obispos de la COMECE felicitan a Herman Van Rompuy por su nombramiento como primer presidente del Consejo Europeo, así como a Catherine Ashton por su nombramiento como alta representante de Asuntos Exteriores de la UE.

Los obispos esperan que estas dos personalidades “promuevan una Unión Europea consciente de su vocación histórica por la paz y la justicia en el mundo entero y determinada a encarnar una comunión en la diversidad”. Asimismo, invitan a estos dos nuevos responsables “a fundar su acción política a la cabeza de la UE en el cuidado del bien común y el respeto a la dignidad humana”.

“Con la elección de un nuevo Parlamento en junio –añaden los prelados–, la puesta en marcha de este nuevo ejecutivo europeo y la entrada en vigor del Tratado de Lisboa el 1 de diciembre, la Unión Europea está equipada para afrontar los desafíos urgentes del próximo decenio”.

La COMECE, añaden, “cuenta más que nunca con acompañar a la UE en esta tarea sobre la base de un ‘diálogo abierto, transparente y regular’ que las instituciones de la UE mantendrán con las Iglesias con base en el artículo 17 del Tratado.

Monseñor Adrianus van Luyn, président de la COMECE se ha congratulado de la entrada en vigor del Tratado de Lisboa. Por este artículo 17, la UE reconoce la identidad y la aportación específica de las Iglesias y mantiene sobre esta base un diálogo con ellas. La COMECE “se siente confortada por la práctica del diálogo con las instituciones de la UE, ya fructífero, y que podrá ser intensificado”.

La libertad religiosa es un derecho fundamental que la COMECE promueve desde hace años. El Consejo de la UE adoptó el 16 de noviembre una resolución que reafirma la intención de la Unión “de continuar dando prioridad a estas cuestiones (de la libertad de religión y de creencia) como parte integrante de la política de los derechos humanos de la Unión Europea”, especialmente a niveles bilaterales y multilaterales.

Los obispos de la COMECE se congratulan de esta prioridad dada a la libertad religiosa. A fin de clarificar este concepto y sus implicaciones, el Secretariado de la COMECE publicará en los próximos meses una aportación sobre la promoción de la libertad religiosa en las políticas de la UE.

Entre los desafíos urgentes que esperan a la UE en este fin de año 2009, los obispos de la COMECE se han detenido, durante su Asamblea Plenaria, en la Cumbre de Copenhague. Hacen un llamamiento a los dirigentes europeos a asumir su responsabilidad en las negociaciones: el cambio climático representa una amenaza para el futuro de la Creación.

Frente a este desafío histórico, señalan, la UE debe asumir compromisos claro y ambiciosos de reducción de las emisiones de gas de efecto invernadero y de apoyo a los países en vías de desarrollo que son afectados gravemente por este fenómeno.

Por último, los obispos se han interesado en la iniciativa del movimiento católico internacional por la paz “Pax Christi”, relativa a la renegociación del Tratado sobre la no proliferación de armas nucleares. Han pedido al Secretariado de la COMECE redactar una aportación con destino a la UE con el fin de acompañar el proceso político con vistas a llegar a una supresión total de las armas nucleares.

[Por Nieves San Martín]

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ZENIT Staff

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