Presentamos en exclusiva un adelanto de la entrevista que será publicada mañana jueves en Noticelam, en la que monseñor Ubaldo Ramón Santana Sequera, arzobispo de Maracaibo, estado de Zulia, traza un panorama de lo que se está viviendo en Venezuela.
La labor periodística ha sido realizada en el marco de la conferencia del CELAM que ha concluido en la ciudad colombiana de Bogotá. Ha sido coordinada por Virginia Bonard y realizada por Sonia del Pilar Gallardo, Martha Patricia León y Daniel Cabaña, apoyándose en la plataforma digital Episcopo.Net
Sobre el motivo de las protestas en Venezuela, y si las mismas se han debido a la escasez de alimentos básicos, a la inseguridad o a la inflación, el arzobispo que indicó que “las consignas que los manifestantes -principalmente estudiantes- enarbolaron en sus diversas marchas y protestas son ésas”, precisando que iniciaron su reclamo porque sentían que eso estaba afectando “a sus familias, a todas las instituciones y a todo el país en general”.
El arzobispo consideró que la escalada de violencia inició con “la intromisión de grupos armados que causan muertes muy certeras por los disparos” y “la represión exagerada de las fuerzas del orden al controlar y reprimir”, exacerbando así el ánimo de los manifestantes.
Aunque no todos estén de acuerdo con las barricadas o guarimbas, para cerrar de forma casi simultánea las principales calles de la ciudad, lo que dificulta las represiones, los números de 21 muertos y más de 300 heridos, demuestran “un profundo descontento de un sector de la población que siente que no ha sido tomada en cuenta”. Y que la gente considera que existen problemas “serios en la conducción económica, social y política, que han generado el desabastecimiento, sin lograr controlar la inseguridad civil,
Recuerda además “que hay muchos venezolanos que se han ido en estos últimos años” y “a la mayoría que se queda se les ha acabado la paciencia”.
Tenemos que decir también que esto proviene de la desconfianza que hay en este sector poblacional hacia las instituciones y los poderes públicos que consideran que no tienen la suficiente autonomía e independencia como para ser instancias a través de las cuales ellos puedan canalizar sus reclamos y ser debidamente atendidos.
Sobre la cumbre de paz convocada por el presidente Nicolás Maduro destinada a contrarrestar la violencia, Mons. Ubaldo Santana indicó que “ha sido tomada en cuenta de hecho por una parte del sector económico pero que ha sido hasta ahora ignorada por los demás” y no utilizada para como fórmula dilatoria de los problemas.
El arzobispo consideró que la “Iglesia Católica junto con las demás Iglesias cristianas y expresiones religiosas en el país” podrán avanzar en la búsqueda de una solución, sin entretanto “ofrecerse como intermediadoras”, a pesar de que algunos movimientos lo han pedido.
Esto porque la Conferencia Episcopal Venezolana ”ha sentido que no goza de la confianza del gobierno para realizar esta labor”.
Al concluir la entrevista que se publica al concluir el primer año del pontificado del santo padre Francisco, el arzobispo indicó: “El Papa Francisco es una parábola viviente de la Buena Noticia del Evangelio. Él encarna completamente para nosotros, para mí, en este momento, la mejor expresión de cómo podemos hacer viva y concreta la Buena Noticia de nuestro Señor Jesucristo”.
