Vietnam reduce la condena a prisión a un sacerdote católico «disidente»

Se levantan sospechas sobre la «reeducación» a la que puede haber sido sometido

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HO CHI MINH CITY, viernes, 18 junio 2004 (ZENIT.org).- A cinco años de reclusión –más cinco de arresto domiciliario– ha sido reducida la condena impuesta al sacerdote católico de Vietnam Thadeus Nguyen Van Ly –de 58 años, es uno de los disidentes más conocidos del país– por un tribunal de Hanoi en 2001 bajo la acusación de atentar contra la unidad nacional.

Así lo confirmó el jueves pasado la agencia periodística oficial vietnamita «Vna» (Vietnam News Agency) afirmando que la reducción de la pena responde a la «buena conducta» del presbítero y a su pleno respeto de la reglas de la prisión de Nam Ha.

Sin embargo, fuentes de la agencia «AsiaNews» –de las «Obras Pontificias Misioneras Extranjeras» (PIME)– en Hué afirman que en la cárcel el padre Van Ly ha firmado cartas enaltecedoras del socialismo vietnamita y de la política del partido comunista.

Algunas personas que han podido visitarle aseguran que el sacerdote muestra signos de desequilibrio mental y que podría haber sido drogado a fin de «reeducarle».

La delegación vaticana encabezada por monseñor Piero Parolin –subsecretario para las relaciones con los Estados–, en su viaje a Vietnam a finales del pasado abril, pudo hablar del caso del padre Van Ly con las autoridades de Hanoi. Por toda respuesta los representantes del gobierno mostraron las cartas de Van Ly que evidencian su «reeducación».

«Esta carta muestra un giro de 180 grados. Sospechamos que ha sido drogado. Ahora el gobierno ya no le tiene miedo. Parece que pronto le liberarán completamente», comentó un sacerdote de Hué.

El padre Van Ly envió en 2001 una carta al Congreso estadounidense para pedir un retraso en la ratificación de los acuerdos comerciales bilaterales entre EE. UU. y Vietnam citando las violaciones de los derechos humanos cometidas por Vietnam y las persecuciones religiosas.

El sacerdote fue detenido y condenado el pasado octubre a 15 años de prisión. La pena se redujo posteriormente a 10 años. Ahora un tribunal local ha ordenado rebajarla a 5 años de prisión; otros 5 deberá pasarlos en arresto domiciliario.

La noticia de la reducción de condena al padre Van Ly llega en vísperas de una visita de representantes de la Unión Europea a Vietnam con ocasión de un congreso sobre los derechos humanos en el que se hablará también del trato a los prisioneros.

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ZENIT Staff

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