HARARE, 18 abril 2002 (ZENIT.org).- Los franciscanos que trabajan en Zimbabwe han declarado que las elecciones celebradas el pasado mes de marzo en el país no han sido libres ni limpias, según informa la agencia católica de información africana CISA.
De esta manera la orden religiosa católica se une a otros organismos civiles y comunidades internacionales que han rechazado el resultado de las elecciones afirmando que han estado caracterizadas por la intimidación, las palizas, los incendios provocados y los obstáculos al derecho de voto.
Los diversos observadores, incluyendo la misión de la Commonwealth, mantienen que miles de votantes se vieron privados de su derecho a votar por un líder de su elección.
Grupos de jóvenes desempleados fueron utilizados para desestabilizar las elecciones causando violencia y violaciones. Las cámaras de tortura del Estado también desanimaron a los votantes.
Se denuncia también que la llamada policía de distribución rápida de la tierra ha paralizado la agricultura causando hambre y que la pertenencia al partido es usada como una condición para la ayuda alimentaria.
