CIUDAD DEL VATICANO, martes 24 de marzo de 2009 (ZENIT.org).- El cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, ha dirigido una carta a todos los obispos del mundo en la que renueva el llamamiento anual de ayudar a los cristianos de Tierra Santa, de cara a la colecta del próximo Viernes Santo.
En la carta, que ha sido hecha pública hoy por L’Osservatore Romano, el cardenal Sandri manifiesta la “fuerte preocupación” de la Santa Sede por la situación de los cristianos, especialmente tras el conflicto de Gaza, y recuerda los continuos llamamientos del Papa en este sentido.
Uno de los objetivos principales de la Colecta “Pro Terra Sancta”, que en la mayor parte de las diócesis del mundo tiene lugar el Viernes Santo, es el de mejorar las condiciones de la comunidad cristiana local para evitar la emigración.
En el texto de la carta, el purpurado exhorta a ayudar a “los hermanos cristianos de Tierra Santa los cuales, junto a otros habitantes de vastas regiones del Oriente Medio, que aspiran desde hace mucho tiempo a la paz y a la tranquilidad, hoy tan amenazadas”.
“La alegría de la navidad ha sido, de hecho, herida por la violenta ruptura de las hostilidades en la franja de Gaza”, recordó, subrayando que “entre las innumerables víctimas hay muchos niños inocentes”.
“Precisamente en Navidad se ha ofuscado la esperanza que trajo el Niño de Belén, tras el alentador apoyo espiritual y material recibido de parte de los peregrinos que en el año 2008 habían incluso superado en número a los del Jubileo del año 2000”, denunció.
“La herida abierta por la violencia agrava el problema de la emigración, que inexorablemente priva a la minoría cristiana de sus mejores recursos para el futuro”, constata el cardenal Sandri. “La Tierra que fue cuna del Cristianismo corre el riesgo que quedarse sin cristianos”.
En este contexto, es necesario confirmar la fe de las comunidades cristianas, cosa que Benedicto XVI tiene muy presente, confortando “constantemente a los cristianos y a todos los habitantes de Tierra Santa con palabras y gestos de extraordinaria atención unidos a su deseo de acudir como peregrino tras las huellas históricas de Jesús”.
La Congregación para las Iglesias Orientales, afirma el cardenal Sandri, interpreta la “amorosa solicitud” del Papa, “renovando la exhortación a todos los católicos para que contribuyan también materialmente al apoyo que necesitan los Santos Lugares”.
“Las Iglesias de rito latino y de los diversos ritos orientales, que se benefician de esta ayuda indispensable, expresan su reconocimiento en la oración constante por las Iglesias particulares de todo el mundo”, declara.
El cardenal Sandri añade a la carta un documento preparado por la Custodia de Tierra Santa y una nota de la propia Congregación, que detallan las obras realizadas con lo obtenido en la Colecta del año 2008.
En este ejercicio se dio una especial atención a las instituciones escolares, y también al programa de este dicasterio que proporciona becas a sacerdotes y seminaristas procedentes de los Santos Lugares que estudian en las Universidades Pontificias.
También se han llevado a cabo restauraciones en diversos lugares, entre ellos Jerusalén, Betania, Belén, Jaifa, Magdala, Nazaret y Nablus (la antigua Siquem).
Se han distribuido también 300 becas a estudiantes de la zona, así como proyectos de asistencia médica y apoyo a las familias, por ejemplo a través de la construcción de apartamentos para matrimonios jóvenes, y ayuda a las parroquias.
También se han distribuido los fondos a obras culturales a través de la Custodia de Tierra Santa, como la Facultad de Ciencias Bíblicas y de Arqueología del Studium Biblicum Franciscanum de Jerusalén.
La Custodia mantiene también en Franciscan Media Center, una forma de apostolado que distribuye contenidos televisivos sobre los Santos Lugares y sobre la vida de las comunidades cristianas locales, así como del Instituto musical Magnificat.