ÁVILA, miércoles 22 agosto 2012 (ZENIT.org).- El próximo 24 de agosto se cumplirán 450 años del primer monasterio fundado por santa Teresa de Jesús, San José de Ávila, y con él el inicio de la Reforma Teresiana del Carmelo. En el calendario de celebraciones, se incluye la participación del cardenal Antonio María Cañizares, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y disciplina de los Sacramentos, que fue obispo de Ávila.
Con este motivo –informa la página web de la Orden Carmelita–, en los últimos meses se han venido organizando numerosos actos en torno al convento de las Madres de San José de Ávila. Actos de carácter religioso, espiritual, cultural y divulgativo: exposiciones, presentaciones de libros, conferencias, ejercicios espirituales, y hasta la apertura de un año jubilar concedido por la Santa Sede.
El prepósito general de los Carmelitas Descalzos, padre Saverio Cannistrà, ha enviado un mensaje a toda la Orden recordando la importancia del 450 aniversario del inicio de la Reforma Teresiana. Un mensaje en el que señala que aquella fecha no es sólo un resaltado en el calendario sino impulso para toda la Orden, para ser testigos con Teresa del camino emprendido por ella. Un camino, que señala el padre Saverio, “que tiene como bastón la oración y como alforja el perderse a sí mismo”, como el de los discípulos de Jesús.
Santa Teresa se sirvió de “la fuerza de la experiencia de Dios y la fuerza de la pasión por una Iglesia y un mundo sometidos a una sacudida histórica”, para llevar a cabo el proyecto de la Reforma, recuerda el padre general a lo largo de su mensaje a la vez que invita a todos los miembros de la Orden a descubrir en ellas el ánimo para emprender también nosotros ese mismo camino teresiano.
Desde la celebración del IV Centenario de la Reforma, en las mismas fechas en las que se iniciaba el Concilio Vaticano II, el padre Saverio constata los grandes cambios que se han producido. Cambios éstos que no siempre “han expresado la creatividad del carisma”, a la vez que “ni toda voluntad de conservación ha sido manifestación de auténtica fidelidad”.
Programa
Los actos centrales de la celebración del 450 aniversario de la fundación de San José de Ávila comenzaron el pasado domingo 19 de agosto con el traslado en procesión hasta el convento de las Madres de la imagen de santa Teresa de Jesús, venerada en la capilla de su nacimiento en la iglesia del Convento abulense de la Santa de los Carmelitas Descalzos, una escultura barroca de Gregorio Fernández.
Desde la Iglesia de Santa María de la Scala, de los Carmelitas Descalzos de Roma, llegó la reliquia del “pie de santa Teresa” que fue expuesta a la veneración de los fieles durante los actos religiosos de los siguientes días en la iglesia del monasterio teresiano.
El día 21 dio comienzo un solemne triduo presidido por el prior del Convento de la Santa de Ávila, padre Francisco Brändle; el día 22, el provincial de los Carmelitas Descalzos de Castilla, padre Miguel Márquez; y el día 23 el vicario general de los Carmelitas Descalzos, padre Emilio J. Martínez.
El mismo día de San Bartolomé, 24 de agosto, la eucaristía solemne estará presidida por el cardenal Antonio María Cañizares, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y disciplina de los Sacramentos.
Finalizada la celebración eucarística, la imagen de la Santa recorrerá en procesión las calles de la ciudad hasta el convento de La Santa.