(ZENIT – Roma).- El papa Francisco envió un videomensaje a los participantes del Jubileo de la Continental Misericordia, que se realiza en Bogotá y cuenta con la participación de 15 cardenales, más de 120 obispos, y dirigentes de todos los niveles de instituciones religiosas y laicas de inspiración católica de 22 países de América Latina, además de Estados Unidos y Canadá. El video que marcó la apertura del evento que durará hasta el martes 30, contó con la participación del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, que también dirigió unas palabras.
El Papa celebra que hayan podido participar a este evento todos los países de América, «ante los intentos de fragmentación y de enfrentar a nuestros pueblos» dijo.
Y les recordó a los participantes, que nos encontramos en medio a “una cultura fracturada, a una cultura que respira descarte”, que está “viciada por la exclusión de todo lo que puede atentar contra los intereses de unos pocos”, que va dejando por el camino “rostros de ancianos, de niños, de minorías étnicas que son vistas como amenaza”.
Esa cultura al mismo tiempo, señala el Santo Padre “promueve la comodidad de unos pocos en el aumento del sufrimiento de muchos” y “no sabe acompañar a los jóvenes en sus sueños, narcotizándolos con promesas de felicidades etéreas y esconde la memoria viva de sus mayores».
“A esa sociedad, a esa cultura –exhorta el Papa en el videomensaje– el Señor nos envía” para llevar “el bálsamo de su presencia”.
El Santo Padre citando la carta a Timoteo, asegura que Pablo no anda con vueltas y dice que Jesucristo vino al mundo para salvar a los pecadores y que “en medio de nuestras múltiples caídas, Jesucristo nos vio, se acercó, nos dio su mano y nos trató con misericordia”. ¿A quién? , se pregunta Francisco, y responde: “A mí, a vos, a vos, a vos, a todos”.
O sea que Pablo llama doctrina segura a esto: “fuimos tratados con misericordia. Y ese es el centro de su carta a Timoteo”. Porque para Pablo, su relación con Jesús está sellada por la forma en que lo trató. “Lejos de ser una idea, un deseo, una teoría –e inclusive una ideología–, la misericordia es una forma concreta de ‘tocar’ la fragilidad, de vincularnos con los otros, de acercarnos entre nosotros”.
Señala que existe un alzheimer espiritual y nos olvidamos de cómo el Señor nos ha tratado y comenzamos a juzgar y dividir la sociedad, en buenos y manos, en santos y pecadores, con una lógica separatista.
Advierte entretanto que “al ver actuar a Dios así, nos puede pasar lo mismo que al hijo mayor de la parábola del Padre Misericordioso: escandalizarnos por el trato que tiene el padre al ver a su hijo menor que vuelve”, porque lo trató con ternura, porque lo hizo vestirse con los mejores vestidos estando tan sucio. “Escandalizarnos porque no lo castigó sino que lo trató como lo que era: hijo”.
El pontífice propone por lo tanto “un trato renovado, buscando que nuestra forma de vincularnos se inspire en la que Dios soñó”. Aseguró que “en esto se juega nuestra catequesis, nuestros seminarios” y también «nuestra organización parroquial y nuestra pastoral”.
“Somos en teoría ‘misioneros de la misericordia’ y muchas veces sabemos más de ‘maltratos’ que de un buen trato. Por favor, se lo pido: Pastores que sepan tratar y no maltratar”, dijo.
Invitó por ello a aprender a tratar “a la gente que no se acerca a nuestras comunidades y que anda herida por los caminos de la historia esperando recibir ese trato de misericordia” y “a dar la mano a aquel que está caído sin miedo a los comentarios”.
El Papa concluye sus palabras recordando que el Jubileo Continental de la Misericordia “no es un congreso, un meeting, un seminario o una conferencia. Este encuentro de todos es una celebración: fuimos invitados a celebrar el trato de Dios con cada uno de nosotros y con su Pueblo”.
Por eso, creo que es un buen momento para que digamos juntos: «Señor, me he dejado engañar, de mil maneras escapé de tu amor, pero aquí estoy, estoy otra vez para renovar mi alianza contigo».
Y concluye deseando “que este encuentro nos ayude a salir fortalecidos en la convicción de transmitir la dulce y confortadora alegría del Evangelio de la misericordia”.
Video del Papa al Jubileo Continental della misericordia
El Papa al jubileo de América: 'Llevemos el bálsamo del Señor a la cultura del descarte'
El Santo Padre envía un Videomensaje para la apertura del evento al que participan 15 cardenales, 120 obispos y representantes católicos de toda América