Por: Valentina di Giorgio
Roma es atravesada por el famoso río Tíber. En una de sus zonas más visitadas por los turistas, el Trastévere, se encuentra la famosa isla Tiberina: sí, una isla en medio de la ciudad. En esa isla hay un célebre hospital conocido por sus servicios de calidad en el área de la ginecología y obstetricia: el Fatebenefratelli. Un hospital que es propiedad de la Iglesia, específicamente de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios que es la que lo gestiona desde el siglo XVI en que quince frailes se establecieron ahí.
A mitad de junio de 2021 trascendió que estaba por efectuarse una venta de este hospital a un grupo sanitario del norte de Italia: el grupo San Donato de una familia de milanesa que habría ofrecido 200 millones de euros por la cesión.
Por cuanto informa FirtsOnLine, en base a informaciones de L´Espresso, las dos razones que habrían llevado a dar marcha atrás serían, por un lado, el doble papel del ex ministro Angelino Alfano quien se puso tanto la camiseta de comprador como la de socio de una oficina legal (el Bonelli Erede Pappalardo) que asistía a la Iglesia en la negociación. Por otro, parece estar en la Iglesia el deseo de una reorganización en sus hospitales para gestionarlos mejor y no tener que llegar al punto de venta.
La Orden de San Juan de Dios está compuesta, a diciembre de 2020, por 1002 miembros, incluidos los novicios. Los religiosos proceden actualmente de 48 diversos países y la edad media es de 60 años. Su presencia en el mundo se distribuye en 22 provincias, 1 delegación general y 6 delegaciones provinciales. Estadísticas completas de la orden pueden conocerse en este enlace.